La compañía Tripak y la cineasta Silvia Zayas, seleccionadas para las residencias de Azkuna Zentroa
Azkuna Zentroa – Alhóndiga Bilbao, Centro de Sociedad y Cultura Contemporánea del Ayuntamiento de Bilbao, ha seleccionado a las artistas que participarán en las convocatorias de dos de sus programas troncales: Babestu. Programa de Apoyo a la Creación y Lanean. Programa de Apoyo a Procesos Escénicos.
La convocatoria de Lanean. Programa de Apoyo a Procesos Escénicos, que ha pasado de realizarse por invitación a ser una convocatoria abierta, está destinada a impulsar el desarrollo en la creación y la difusión artística de proyectos de artes en vivo. La residencia tendrá una duración de una o dos semanas en el primer semestre de 2025. En este caso, la cuantía máxima destinada a cada uno de los proyectos es de 1.500 euros / semana, además de equipamiento y la opción de alojamiento durante su estancia en residencia.
Esta convocatoria se publicará semestralmente, dos veces al año, considerando que los tiempos de creación en las artes en vivo requieren plazos más amplios. La próxima convocatoria, cuyo desarrollo tendrá lugar en el segundo semestre de 2025, se publicará en torno al mes de enero.
Los dos proyectos seleccionados son:
Silvia Zayas. Material girls
La artista Silvia Zayas inicia en 2025 su nuevo proyecto, Material girls, en el marco del programa Lanean, de apoyo a procesos escénicos. El trabajo, según explica su autora, «parte de lo autobiográfico para explorar el trauma colectivo heredado por una segunda generación de niñas. Son las hijas/sobrinas de excombatientes (obligados por el régimen portugués) recién llegados de Guiné Bissau y otras excolonias tras la guerra de independencia con Portugal, y su posterior renarrativización de la historia a través de la imaginación infantil plagada de silencios, sincretismos y fantasmas».
Material girls se materializará en «una pieza en vivo, trabajada a partir de experiencias colectivas con excombatientes y mujeres que pertenecieron a mi generación en varios suburbios y entornos domésticos de la ciudad de Porto y la imaginación infantil, sin jerarquías entre elementos».
Tripak. ENCOUNTERS
Pasados dos años del estreno de Platea, Tripak (Mayi Martiarena, Maite Mugerza, Marina Suárez, Natalia Suárez y Andrea Berbois) ha empezado a esbozar ENCOUNTERS, su nuevo proyecto escénico. Parte de su proceso creativo tiene lugar en 2025 en Azkuna Zentroa, en el marco del programa Lanean de apoyo a la creación de las artes en vivo.
ENCOUNTERS, según adelantan desde la compañía vasca de artes escénicas, «mira hacia lugares «desangelados», donde encontramos resquicios humanos obviados que, aunque grises, se muestran salvajes. (…) El espacio en el que nos situamos es un interior abierto donde objetos personales sin aparente encanto pierden su función a la intemperie, y convertidos en deshecho decoran el dormitorio de un desconocido que nos acoge en su intimidad, sin mirarnos nunca».
La residencia en Azkuna Zentroa arranca en un punto germinal de este nuevo trabajo, donde sus integrantes fantasean en torno a un lugar imaginado. El proceso creativo de la compañía está alineado con el propósito del programa de residencias del Centro que busca otros tiempos para la creación y un encuentro entre el público y el proceso.
Programa Babestu
Babestu. Programa de Apoyo a la Creación tiene como objetivo impulsar la creación y la difusión artística a través de la selección de proyectos vinculados con las líneas de programación del Centro. En esta ocasión, se han recibido 86 proyectos, entre los que se han seleccionado los de las artistas Beatriz Sánchez, Inés García, Estibaliz Sádaba Murguía e Ivonne Villamil.
La residencia tendrá lugar en Azkuna Zentroa – Alhóndiga Bilbao en Lantegia en 2025 y cada una de las artistas recibirá 6.000 euros para su desarrollo además del soporte, infraestructuras, asesoramiento y mediación del Centro. En su conjunto, los cuatro proyectos seleccionados están vinculados a las líneas de programación de Azkuna Zentroa como artes visuales, artes en vivo, literatura, cine y audiovisuales, además de mediación como eje transversal.
Babestu, creado en el marco del Proyecto Programa para la conexión entre la sociedad y la cultura contemporánea, acompaña a procesos e investigaciones artísticas que suponen una mirada a las nuevas narrativas del arte. Propuestas que se sitúan en la intersección entre lo teatral, lo performativo, lo gráfico y la instalación escultórica; la imagen, el cuerpo y la voz; el archivo, el artist moving image y el video ensayo; el cine, el videoarte y los new media. Y siempre están pensados para compartir con el público.
Los cuatro proyectos seleccionados son:
Beatriz Sánchez. Fórmulas de Cinética Doméstica [3]
La creación audiovisual y el arte digital centran la trayectoria de Beatriz Sánchez. En su práctica artística utiliza medios tradicionales como el dibujo o la escultura y los mezcla con el vídeo, los medios digitales y actuaciones en directo. La experimentación y el error son partes integrales de su obra, caracterizada por los procesos libres, la improvisación, la magia, el humor y el desorden.
En 2025 inicia en Azkuna Zentroa su residencia con Fórmulas de Cinética Doméstica [3], un proyecto de elaboración artesanal que no aparca la animación ni la imagen en movimiento, pero en el que vuelve al trabajo con las manos, dando rienda suelta a su imaginario. En Fórmulas de Cinética Doméstica [3]plantea convertir el espacio de trabajo en un laboratorio de investigación y experimentación, donde desarrolla una serie de artefactos escultóricos mecanizados.
Inés García. El tacto del contacto
El oído, la vista y el tacto recorren las instalaciones, esculturas y películas experimentales más recientes de la artista-cineasta Inés García. El tacto del contacto, su nuevo proyecto, es una investigación desde donde desarrolla el lenguaje fílmico y su disposición en el espacio expositivo.
Abandona así los grandes relatos y paisajes inhóspitos de trabajos anteriores para, sin guion preestablecido, lanzarse al encuentro discreto de la proximidad y de la sencillez. A la vez, la dificultad de mostrar piezas audiovisuales en el espacio expositivo le lleva a proponer maneras propias de mostrar su trabajo dentro del cubo blanco.
El trabajo iniciado en 2024 con la filmación de procesos de creación manual como un bolo de madera, una tarta esférica o el bordado de encaje; y el desarrollo de su primera «cabina de proyección» junto al arquitecto Diego Sologuren, se amplían y consolidan en 2025 durante su estancia en Azkuna Zentroa como residente de Babestu.
Estibaliz Sádaba Murguía. RUINAS (cuaderno de notas experimental)
A través de sus propuestas, Estibaliz Sádaba Murguía busca la creación de un espacio de diálogo, encuentro, reflexión y debate que permita analizar el contexto en el que vivimos desde una perspectiva artística. En los últimos años ha enfocado su trabajo en la relación entre espacio y memoria, investigando cómo interactúan estos dos elementos en entornos públicos y privados, con un énfasis particular en la perspectiva de género.
Durante su residencia de Babestu trabaja en RUINAS (cuaderno de notas experimental), proyecto que consta de una serie de textos, sonidos y performance. En él, toma como punto de partida la escritura de textos/manifiestos poéticos experimentales, escritos en primera persona, para visibilizar el trabajo que han realizado las mujeres históricamente, así como los papeles que socialmente hoy siguen desempeñando, utilizando el cuerpo como lugar de experimentación.
Ivonne Villamil. Meteoro
Artista visual y sonora, Ivonne Villamil trabaja en el cruce entre el arte y las ciencias, mediante prácticas y tecnologías accesibles y con dispositivos y prácticas de escucha en la estrecha relación entre materia, memoria y territorio, explorando a partir de la geofonía o sonidos de la tierra.
Meteoro, el proyecto que desarrolla como residente del programa Babestu, nace de la urgente y necesaria llamada a la acción y a la reflexión social y cultural por el cambio climático. Desde la práctica creativa, la investigación artística y los lenguajes propios del arte contemporáneo, este proyecto propone expandir y ampliar la percepción y experimentación de los fenómenos atmosféricos y climáticos a través de sus manifestaciones sonoras en la tierra, en el cielo y en el espacio exterior.