Aplaudimos a la agrupación peruana Yuyachkani que fue la merecedora del El Premio Gallo de La Habana, instituido para reconocer a grupos teatrales, publicaciones o hechos escénicos que constituyan un aporte al teatro de América Latina y el Caribe… Este prestigioso galardón lo han recibido el cubano Vicente Revuelta por la dirección de La noche de los asesinos, de José Triana, (1966), El Festival Iberoamericano de Teatro de Cádiz en sus siete ediciones (1992), El Festival Internacional de Teatro de Caracas en la persona de su fundador y director Carlos Giménez (1993), El Odin Teatret de Dinamarca (1994), el argentino Javier Villafañe, maestro de titiriteros (1995) y Santiago García, director del grupo colombiano La Candelaria (1996). Yuyachkani recibe el Gallo de La Habana 2001 por su trayectoria artística y voluntad renovadora. Se trata de un grupo que sostiene la memoria latinoamericana desde el entrenamiento del cuerpo y la palabra, como escuela viva de generaciones de teatristas de todo el mundo por su larga tradición de compromiso político e insurgencia estética. Fundado en Lima por un grupo de amigos hace treinta y un años, Yuyachkani adoptó como credo hacer un teatro conectado con el tiempo presente, reflejar el aquí y el ahora, convertir la escena en una escritura para la vida y la cotidianidad. Para ellos la cultura andina, sus mitos y leyendas son fuentes que tienen el mismo valor que los grandes textos del teatro universal. Escribir sus espectáculos ha sido una constante poética, un fenómeno paralelo al del descubrimiento del país y de nuevas maneras de hacer teatro a partir de la invención cotidiana de la cultura tradicional peruana.
Tomado del Boletin del mes de Junio de RedLat.
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