Nuevos realizadores piden ayudas y critican sistema distribución
Nuevos realizadores que participaron hoy en una mesa redonda dentro de la XXIII edición de la Mostra de Valencia-Cinema del Mediterráneo señalaron la necesidad de obtener más apoyo por parte de la Administración para continuar haciendo cine y criticaron que la distribución de las películas «está copada» por la industria norteamericana. Afirmaron que ayudar a los nuevos realizadores es una forma de renovar el cine español y apostaron por conseguir una «industria potente a este lado del charco» para hacer frente a las producciones de Hollywood.
Resaltaron la «calidad» de las cintas españolas y el trabajo de actores y técnicos que se embarcan para hacer realidad una película con bajo presupuesto y, además, coincidieron en que para las productoras es fácil apoyar la realización de una ópera prima porque les reporta beneficios debido al sistema de subvenciones.
En la mesa redonda, moderada por el periodista Rafa Marí, participaron los directores Roger Gual y Julio Wallovits, de ‘Smooking room’; Antonio Llorens, de ‘Après le trou’; Luis Marías, ‘X’; Alvaro García Capelo, de ‘Canícula’; Miguel Alcantud, de ‘Impulsos’; Isaki Lacuesta, de ‘Cravan vs Cravan’; y Ramón Salazar, de ‘Piedras’.
Estas películas compiten en la sección Opera Prima de la Mostra, junto con los títulos ‘El sueño de Ibiza’, de Igor Fioravanti, ‘Reflejos’, de Miguel Angel Vivas, y ‘Un perro llamado Dolor’, de Luis Eduardo Aute.
En el encuentro, celebrado en el Museo de la Ciudad, Ramón Salazar señaló que el cine americano es «malo y ellos lo saben, por eso tiran de nuestros actores y nos hacen propuestas a los que estamos aquí».
La solución, para este joven realizador, «es mantenernos y seguir haciendo cine de calidad, aunque no tengamos apoyo, porque es la única manera de conseguir una industria potente a este lado del charco».
Por su parte, Isaki Lacuesta señaló que el problema no es hacer la primera película sino la cuarta porque el sistema de subvenciones apoya las óperas prima pero no a los realizadores que quieren continuar haciendo cine.
DISTRIBUCION Y SUBVENCIONES
Alcantud destacó que se hacen «muchas películas que no se pueden estrenar porque el circuito de salas no lo permite» y también se refirió al «problema» del sistema de subvenciones, «que no apoya al cine sino que sólo permite hacer películas a autores jóvenes».
García Capelo defendió que se apoye a los jóvenes realizadores porque es «una forma de renovar el cine español», si bien criticó que las subvenciones «son pequeñísimas y están congeladas desde hace diez años», por ello defendió que se incrementen y se asegure el apoyo de la Administración al nuevo cine español como manera para «encontrar fórmulas nuevas para competir con otras industrias como la americana».
Por su parte, Roger Gual y Julio Wallovits relataron que ninguna productora ni cadena de televisión quiso apoyarles para hacer ‘Smooking room’, por lo que decidieron constituir una cooperativa y sacar adelante una película «modesta, sin dinero ni pretensiones», pero que ha conseguido «llegar a bastantes salas».
Por otra parte, en el turno de preguntas del público se planteó la polémica creada por las críticas del Arzobispado al ciclo ‘Escándalo’ de la Mostra. El subdirector del festival, Rafael Gil, explicó a los nuevos realizadores, ya que la mayoría no conocía lo sucedido, la «pequeña confrontación» surgida por «unas películas de los años setenta» y calificó estos hechos de «kafkianos». Al respecto, Lacuesta apostilló irónicamente que es «una pena que no se escandalicen de nuestras películas».
En el turno del público también intervinieron las actrices Mariola Lafuente, Ana Risueño, de ‘Impulsos’, y Adriana Domínguez, de ‘El sueño de Ibiza’, quienes destacaron las dificultades de los jóvenes realizadores para hacer sus películas. Adriana Domínguez, que acaba de terminar el rodaje del nuevo filme de Achero Mañas, ‘Noviembre’, se refirió a la «lucha» de éste por conseguir hacer la película como él quería sin manipulaciones ni imposiciones.