El próximo 9 de marzo se estrena en la madrileña Cuarta Pared la nueva propuesta de Elena Córdoba, “Quedémonos un poco más sentados”, un estudio sobre el deseo, ese espacio entre lo posible y lo real. Para acercarnos desde el cuerpo a él los autores de la pieza –Patricia Lamas, Montse Penela, María José Pire, Carlos Marquerie y Elena Córdoba– se han detenido a observar la piel, para, a través de sus texturas y de sus imágenes, dibujar paisajes que hablen del deseo con la claridad que a veces no encontramos en las palabras.
Esta obra está construida a través una serie de cuadros independientes en los que se muestran distintos aspectos de la piel. Estos cuadros son como las páginas de un inventario, alegorías construidas a través de la piel, de sus sensaciones y de sus imágenes. Son paginas de datos poéticos que se ofrecen al espectador para que él mismo deambule en su recorrido.
La piel transformada en contacto con objetos inertes
La piel dando vida con su movimiento a objetos inanimados.
La piel transformada a través del movimiento de los músculos
Los lugares ocultos de la piel, los que nunca mostramos
La piel vencida por su peso.
Así han desdibujado la línea entre lo que está vivo (el cuerpo) y lo que no lo está (el objeto); entre lo que puede moverse y lo que en su naturaleza es inerte. Y el resultado es un paisaje extraño, dibujado a través de la belleza perturbadora que tiene el cuerpo al ser transformado.
Observando por estas transformaciones del cuerpo, reencontramos nuestro tema el deseo, como si el cuerpo donde se pudieran escribir nuestros deseos fuera un cuerpo imaginario, un cuerpo adornado o dividido. Pero nunca el cuerpo que estamos habituados a sentir y a mostrar, un cuerpo que hemos domesticado para que escuche sus obligaciones antes que sus deseos, un cuerpo que ha olvidado ya cómo escucharlos.
¿Si nuestros actos obedecieran a nuestros deseos qué paisajes crearíamos?
¿Cómo sería mi cuerpo si fuera sólo un cuerpo deseado, un cuerpo posible?
¿Cómo adornaría mi piel en mis deseos?
¿Qué relación tendría con mi cuerpo si este no fuera caduco, si su interior no me recordara su debilidad?
Elena Córdoba, coreógrafa independiente, se forma en danza clásica y contemporánea en Madrid y París. Dirige obras desde 1989, sus últimos trabajos han sido: “ Sin Correa”, “Los negocios acaban a las diez”, “Bobos” y “Silencio”. Ha sido becada por la residencia de Estudiantes de Madrid y ha recibido el premio a la investigación en los lenguajes escénicos en el Festival INFANT de Novi Sad. Sus obras se han presentado entre otros, en festivales como: El Festival de Otoño de Madrid; Turning World de Londres y Encuentros Acarte en Lisboa, Escena Contemporánea de Madrid, Articule de Annecy (Francia), Sitges Teatre International, Teatro Central de Sevilla, VEO de Valencia. Ha trabajado como coreógrafa y ayudante de dirección en obras de Rodrigo García, Carlos Marquerie y Antonio Fernández Lera.
