La recientemente inaugurada Sala Miriñaque de la calle Isaac Peral 9 en Santander acogerá los días 24 Y 25 de junio dos representaciones de la obra La Secreta Obscenidad de Cada Día a cargo de la compañía argentina La Granada. La programación de Miriñaque para el mes de junio se completa con el Taller de formación de intérpretes “El actor creador y la dramaturgia escénica” que se desarrollará los días 21,22 y 23 de 19 a 22 horas. Marx y Freud protagonizan La Secreta Obscenidad de Cada Día. Sentados frente a un colegio de señoritas, se pelean, conversan, discuten, se desdoblan en diversos personajes, y finalmente se convierten en cómplices y amigos en un juego de dobles sentidos constante de las palabras La secreta obscenidad de cada día es una obra que exige una reevaluación de lo visto ó leído una vez que llega al final y se descubren los enigmas presentes en esta. El significado doble que ofrecen los términos cañón y calibre en el contexto del exhibicionismo, contribuye a que se desvíe la mirada de lo político a lo sexual.
El vocabulario armamentista (calibre), utilizado por Carlos Marx en su parlamento, para referirse a lo que el público asume es el órgano sexual de Sigmund, provoca la risa del espectador. Carlos y Sigmund recurren a presentar diversos papeles cada vez que pasa un coche por donde ellos se encuentran , en diferentes ocasiones simulan saltar una cuerda, sacan un perrito de peluche, hacen de payasos, juegan algún juego infantil, alimentan palomas imaginarias, representan un circo, etc.. También cada personaje menciona las diferentes facetas por las que ha pasado en el transcurso de sus vidas. Mientras se descubre el enigma, se produce otro. ¿Son realmente estos dos hombres Carlos Marx y Sigmund Freud?, ¿Son dos terroristas con nombres falsos? ¿Son dos locos que se “creen” Marx y Freud?
Escena Miriñaque continúa en junio la labor de formación de intérpretes teatrales con la puesta en marcha del taller El actor creador y la dramaturgia escénica que impartirá Hugo Bogan y que tiene como objetivos experimentar el entrenamiento como un proceso de creación; a través de herramientas que permitan, modelar el cuerpo en escena, descubrir la teatralidad en el propio cuerpo, estimular la creatividad, generar un lenguaje personal y construir una dramaturgia escénica propia El taller propone un acercamiento al cuerpo-mente, despojado de ideas preconcebidas, que permita al participante adquirir una base de trabajo sobre la cuál crear y desarrollar una idea. Esta iniciativa se convierte en una investigación sobre el actor como generador de múltiples lenguajes mediante la propuesta del desarrollo de una dramaturgia escénica propia y de la toma de decisiones sobre el propio trabajo, para que éste se defina y adquiera profundidad.
