El Festival de Cine Iberoamericano acogerá el próximo 19 de noviembre en la Sala 1 de CineBox Aqualon de Huelva, el estreno de Violeta y el Baúl Americano, el cortometraje de las onubenses Luna Baldallo y Rocío Gonzálezque retrata la personalidad de la primera mujer ilusionista de España. La 34ª edición del Festival de Cine Iberoamericano de Huelva servirá de marco para el esperado estreno del cortometraje documental Violeta y el Baúl Americano, dirigido por las realizadoras onubenses Luna Baldallo y Rocío González, y que retrata la personalidad de Manuela Rejas, la primera mujer con carnet de ilusionista de España.
El corto es una producción de Artegestión Cultura y Eventos, y cuenta con el patrocinio de la Diputación de Huelva, la Fundación Cajasol y la Universidad de Huelva. El rodaje, que comenzó a principios de octubre de 2007 en León, concluyó en diciembre en localizaciones de la provincia de Huelva, concretamente en Puebla de Guzmán, donde se filmó la parte más onírica de un documental cuyo montaje final alcanza los 19 minutos.
Este proyecto nació a partir de la participación de Manuela Rejas en el espacio Imaginario que emite Radio Nacional de España, cuya sección ‘Héroes anónimos’ destacó su brillante personalidad y su amor por la vida y las personas. Tras ese episodio, un equipo humano artístico y técnico se puso manos a la obra para trabajar desinteresadamente en un cortometraje en el que se plasmara la lucha de esta gran mujer a lo largo de toda su vida.
Los ojos de Luna Baldallo y Rocío González se dejaron contagiar por esa alegría que comparten no sólo Manuela Rejas, sino todos sus convecinos, y eso, sin duda, ha quedado reflejado en el resultado de su trabajo. En la primera fase del rodaje participaron alrededor de cincuenta extras bajo la coordinación de un equipo técnico compuesto por una docena de profesionales entregados al proyecto desinteresadamente.
Para que este recorrido por la vida de Manuela Rejas fuera posible, el Ayuntamiento de Villarejo de Órbigo, al que pertenece Veguellina, prestó colaboración en materia de permisos de rodaje y otro tipo de gestiones administrativas, para hacer realidad lo que contemplaron como una oportunidad de rendir merecido homenaje a una de sus convecinas más destacables y, al mismo tiempo, humilde, cuya aportación a la comunidad se plasma en su actitud generosa ante la vida.
Manuela, que se autodefine como “una ciudadana del mundo”, ha participado intensamente en el proceso de elaboración de este testamento biográfico aportando sus creaciones en campos como la literatura, concediendo entrevistas al equipo de rodaje, pero sobre todo contagiando a todos con su energía vital y su espíritu de superación, el mismo que en la actualidad la hace vencedora de su lucha personal contra el cáncer bajo el lema que define toda su existencia: “no tirar jamás la toalla”. Según una de las directoras, Luna Baldallo, “Manuela luchó con rebeldía y tesón por hacerse un hueco profesional en el difícil mundo del ilusionismo en una época en la que la mujer estaba relegada mayoritariamente a funciones domésticas”.
El rodaje de Violeta y el Baúl Americano se ha llevado a cabo en formato digital y en 8 milímetros. Su naturaleza documental no es óbice para desplegar una elaborada intencionalidad estética, que ha quedado reflejada en el empleo de recursos retóricos cinematográficos como travellings, flash backs y planos secuencias apoyados en la técnica de cabeza caliente.
A la música se ha situado una figura tan destacada como la guitarra flamenca de José Manuel Roldán, que ha trabajado en obras de la talla de El amor brujo de Carlos Saura.
