Muro-muro/Dynamo Théâtre
Juvenil ingravidez
Obra: Muro-muro
Intérpretes: Mélanie Desjardins, Héloïse Depocas, Sébastien Belzille, Alexandre Tessier, Daniel Desparois
Música: François Dupuis
Dirección: Robert Dion
Producción: Dynamo Théâtre
Complejo Educativo –Eibar- 17-02-02
Los cinco jóvenes actores-bailarines-acróbatas-escaladores parecen tocados por el don de la ingravidez. Sus cuerpos, con pequeñas ayudas, son capaces de lograr situaciones casi inverosímiles, como es andar por un muro vertical, subir por ese muro con agilidad felina sin más ayuda qu su impulso y sus brazos y manos y dar saltos y hacer piruetas de toda índole para seguir con un guión musicado en donde se cuentan historias sencillas, que van desde los juegos adolescentes de seducción, a las pruebas de competencia en la dificultad y el reto del más difícil todavía. Todo ello marcado por la inocencia, la ternura, una ingenuidad que representa la sensación de vivir en mundo de ensueños y donde todos los conflictos se resuelven con una auténtica maestría dramatúrgica que se basa siempre en lo físico, en un alarde, en una expresión corporal sustentada en una preparación circense y danzística, que se puede sustentaren un salto haca atrás o en una coreografía de los cinco ejecutando difíciles piruetas aéreas.
Es un espectáculo para públicos familiares, qu con su colorido y su puesta en escena dejan al espectador presenciando una suerte de circo-ballet, una propuesta muy rítmica, muy sugestiva para jóvenes públicos, tanto por su movilidad, por sus dificultades espaciales, su capacidad para hacer olvidar la ley de la gravedad, donde las acrobacias, los saltos, las figuras que se crean y se descrean son las que van configurando la narración, que se va presentando linealmente, a base de situaciones que se abren y se cierran, pero con una continuidad espacial y de personajes que se van presentando conforme se van significando en sus acciones, manteniendo siempre un rasgo definitorio de sus caracteres. Un trabajo juvenil, alegre, distendido, agradable de presenciar y en donde queda claro el trabajo físico, y la sensibilidad creativa para canalizar toda la técnica aplicada por estos alumnos de una de las escuelas de circo más aplaudidas de Canadá, en una comunicación sencilla para todo tipo de espectador.
Carlos GIL