Sonetos de amor y otros delirios/Shakespeare/Teatro del Temple
Del amor al teatro
Obra: Sonetos de amor y otros delirios
Autor: William Shakespeare
Dramaturgia: Alfonso Pou, Carlos Martín
Intérpretes: Javier Aranda, José Luis Esteban, Francisco Fraguas, Laura Gómez-Lacueva, Ana García
Escenografía: Tomás Ruata
Iluminación: Bucho Cariñena
Vestuario: Beatriz Fernández Barahona
Dirección: Carlos Martín
Producción: Teatro del temple
Serantes Kultur Aretoa – Santurtzi – 10-03-06
Asistimos al ensayo de una compañía de teatro que se enfrenta a los sonetos de amor de William Shakespeare. Se parte de un informalismo, de una situación de metateatro, para ir acumulando capas de intensidad dramática. No son fáciles los sonetos, no son fáciles los textos de Shakespeare si se dicen sobre un escenario sin acciones, contextualizados, enfatizados o dichos en libre declamación van tomando sentido.
Por ello el juego establecido por Alfonso Plou, dramaturgo habitual de la compañía aragonesa, junto a Carlos Martín el director que también firma la dramaturgia logra crear un tejido escénico, teatral, que les permite ir desde la profundidad de un verso abiertamente de amor homosexual, a los juegos mucho más ligeros y bucólicos de algunos pasajes de “El sueño de una noche de verano”, con los actores en traje de ensayo, pero que poco a poco van incorporando algunos elementos de vestuario, que les sitúan ya en lo que sería la misma representación.
Es un trabajo divertido, que acerca los versos difíciles, incluso mostrando dos versiones, dos traducciones, de alguno de ellos, donde aparece un trasunto del propio bardo inglés, que saben romper el clima poético con asuntos propios de ensayo, para no dejarse caer en un tono excesivamente mayestático, tan fácil de llegar con algunos de los sonetos que son realmente bellos, pero intrincados. Uno de los aciertos es que logran la complicidad de los espectadores, a los que tratan con cercanía, involucrándolos en las situaciones, desatascando cualquier engolamiento, para que llegue el verbo en términos comprensibles al oído del ciudadano de hoy, pero manteniendo el empaque de su estructura y de su prosodia. Entrando y saliendo el equipo actoral a la recitación, a la representación, y la otra representación en tono más coloquial, más cercana, el supuesto ensayo. Luces, elementos escénicos, apoyaturas musicales ayudan a transmitir el aire de fiesta de este arrebato de amor y teatro. Del amor al teatro. Del teatro al amor.
Carlos GIL