Críticas de espectáculos

Cantando claro. Crónica del VII Festival de Teatro en Cali

Cuando vi por primera vez al grupo de teatro Malayerba, hace mas de 15 años en el Teatro de la Candelaria de Bogota, en uno de los Festivales Iberoamericanos de Teatro, con la obra PLUMA Y LA TEMPESTAD, fue una presentación inmortal. Luego lo volví a ver en el Teatro de la Guaba en Quito ˆ Ecuador, dentro de las II Jornadas Internacionales de Artes Escénicas Teatro  en el Sur, en el 2002, al cual asistí en calidad de invitado, la obra fue EL JARDIN DE PULPOS, nuevamente  otra presentación inolvidable y ahora en el marco del VII  Festival de Teatro de Cali (1-8 de abril de 2009) en el Centro Cultural Comfandi con la obra LA RAZON BLINDADA también como las anteriores con dirección y dramaturgia de Arístides Vargas, personalmente en esta ocasión  no colmo mis expectativas. La actuación muy buena e impecable el espectáculo,  pero en cuanto al texto, dramaturgicamente  se queda en frases que van y  vienen, bonitas, graciosas, divertidas, pero que en definitiva no dicen nada. Textos que se pueden decir  con o sin rodachinas, así estén basados en Don Quijote, de Cervantes, o en La verdadera historia de Sancho Panza de Kafka que de no ser por la explicación que a través de subtítulos hacen al final de la pieza, uno como espectador quedaría absolutamente en blanco.

Considero que entre otros ingredientes, no deben faltar en una buena obra de teatro: el argumento, suspenso, desenlace, emociones y no las notas aclaratorias y los elogios previos a la presentación.

Pasando al Grupo Tragaluz también del Ecuador, debo confesar que se trato de una presentación poco resistible, uno porque después de los honores patrios,  nos pusieron a esperar varios minutos a que los organizadores del Festival hicieran presencia en el proscenio a repetir las palabras de rigor. Otro, porque a mi lado derecho una espectadora, al ratito de iniciada la obra se puso a matar tiempo mandando mensajes de texto por su celular, a mi lado izquierdo un aficionado a camarógrafo, insistía en capturar imágenes de las actrices nuevamente en rodachinas, – parece que esta de moda en el teatro, las rodachinas -, otra porque a mi espalda unos actores con acento paisa no hacían mas que cuchichear y desaprobar lo que mostraba la obra y para rematar, porque al frente mío, motivo de mi asistencia al Municipal, lo representado fue bastante tedioso que según mi  entender, se lo achaco al  autor o los autores de CARTAS CRUZADAS. 

Continuando con mis apreciaciones el montaje SOLO COMO DE UN SUEÑO DE PRONTO NOS LEVANTAMOS, Premio Nacional de Dramaturgia 2008 otorgado por la Fundación de Teatro de Cali a su directora y dramaturga, la actriz Beatriz Camargo de Villa de Leiva, debo sinceramente expresar que por más que trate de meterme en el cuento, realmente no entendí su historia. Muy llamativo el espectáculo por su colorido, sus mascaras, las luces, la música, el tapete de maíz y la caída del grano al final de la obra, que la pieza teatral en si misma, dada que se asemejaba mas a una comparsa que a imágenes escénicas mas convincentes.

Viene lo que ansiosamente esperaba, la obra ganadora del Premio Nacional de Dirección Escénica Ministerio de Cultura 2007  ELECTRA, particularmente por mi apego a los griegos y por mi resiente visita a Troya en Turquía, me decepciono y justamente porque hace un año en mi condición de Jurado Calificador del Festival Estudiantil de Teatro, organizado por el Teatro Municipal, me dio la sensación de estar viendo otro grupo de jóvenes de secundaria aficionados a las representaciones. Que patetismo el de Orestes cuando aparece bañado en sangre con toneladas de vísceras del despiadado Egisto, mostrándolas sanguinariamente, de idéntica forma, cuando misión cumplida, trae las otras vísceras de su malvada madre Clitemnestra -además de la risa del publico, me hicieron acordar del grupo de teatro Esfenoides de la década de los 90-   Shakespeare les aconsejaba a sus actores no gritar los textos, y acá, todo lo contrario, que gritería la de sus protagonistas, la música  de carácter poco definido y que desperdicio de sal, a propósito, afirman que regar sal es de mal agüero.

Con Estudio Teatral Santa Clara de Cuba que trajo LOS ATRIDAS, me hago la siguiente reflexión: será que uno asiste a teatro para sufrir por lo que no entiende, como me sucedió también con esta obra, o se asiste para disfrutar de lo representado  como lo ocurrido con UN ENEMIGO DEL PUEBLO del Teatro del Valle participante de este evento y sobre el cual hice amplios comentarios en otra oportunidad. La actuación de los jóvenes de Santa Clara fue tan elemental y tan grande mi disgusto, que al salir del teatro desfogue mi encono por las opiniones contrarias a las mías de un conocido espectador.

El Grupo Presagio ofreció un bello montaje de EDIPO. POEMA DRAMATICO EN UN ACTO con dirección y dramaturgia de Diego Fernando Montoya. Hay una llamativa plástica escénica tanto en el vestuario como en el manejo de las luces y una acentuada sonoridad a base de efectos guturales que rompe un poco con la quietud de sus actores. Un texto basado en Edipo Rey que por momentos me remitía a León de Greiff y Jorge Salamea pero que en definitiva no me dijo mayor cosa.

La Tarumba de Cali se fue por el campo del esoterismo al escenificar el POPOL VUH, un tema lleno de mensajes ocultos muy interesantes para los versados en la materia, y de todas maneras disfrutable por las historias que narran escénicamente, con la utilización de una pesada red asemejando a una canasta de básquetbol por la cual suben y bajan los actores. Un montaje agradable y expresivo corporalmente con efectos sonoros acertados y buena iluminación.

Y llega por primera vez a Colombia, Macunaima considerado al decir de las directivas de este festival, el mejor grupo del Brasil, con 40 años de trayectoria artística y con uno de los directores mas importantes del teatro latinoamericano, con su obra FOI CARMEN MIRANDA no tan conocida en nuestro medio como si lo fue Amparo Arrebato en sus años mozos. Un espectáculo bastante pobre en comparación a otros montajes de grupos no tan famosos que tuve oportunidad de ver en Río de Janeiro en el 2007 y en los cuales el portugués no fue obstáculo para gozarlos de principio a fin. Claro que en el Macunaima hablaban en fonemol, lengua ficticia usada por el grupo, razón por la cual, pienso, resulto tan sosa. Sin lugar a dudas no solo les metieron a sus organizadores, gato por liebre, sino que quedaron ante la concurrencia como Simon el bobito de la mano del pastorcito mentiroso.

macunaimaIrrumpe en la programación de este festival, LA REINA DE LOS BANDIDOS del Teatro La Mascara, sin antesala de anuncios como lo mejor del certamen, sin bombos ni platillos, ni fotógrafos ni camarógrafos dispuestos a enriquecer con este acontecimiento, las memorias del  encuentro teatral. Por el numero de obras que alcance  presenciar, puedo decir sin temor a equívocos que, LA REINA DE LOS BANDIDOS resulto ser el  plato fuerte de esta gran fiesta. Que monologo el que se jala esta joven actriz, Susana Uribe, quien de una manera clara y contundente nos va narrando apoyada en imágenes muy impactantes la historia de esa líder hindú de nombre Phoolan Devi, que sin saber leer y escribir llego al parlamento de su país y asesinada luego a escasos 27 años de existencia. Montaje rico en imágenes muy precisas donde se la muestra dedicada a sus faenas cotidianas cuando era niña, o cuando obligada tiene que casarse con un hombre que le triplica en edad, o cuando por defender a su familia es torturada y violada por la fuerza represiva, o cuando en bicicleta a todo galope nos va metiendo emocionalmente mas y mas en su argumento. Que combinación tan bien lograda entre el cine y la actriz, imágenes llenas de sutileza, poesía y angustia en sus ojos, con la mirada clavada en el corazón de los presentes y que acertijo el manejo de las luces, mas aun cuando uno sabe que técnicamente en este asunto, La Mascara no cuenta con un buen equipo, felicitaciones a su técnico de cabecera.

Resumiendo, dejo ver que aun no salgo de mi entusiasmo por la gran acogida de este evento teatral en Cali, es como un tsunami cultural lo que acaba de suceder, en décadas no veía tanta asistencia de publico a los diferentes escenarios donde tuve oportunidad de entrar.

Resaltar la buena voluntad de nuestras autoridades municipales que entendieron la importancia de auspiciar económicamente una actividad eminentemente artística y cultural y aceptar que esta es otra manera de hacer ciudad, y limpiar así la maléfica imagen que se tiene ante propios y extraños de la mal llamada capital de la salsa.

Destacar el respaldo publicitario brindado por el periódico El País al festival, y ojala en lo sucesivo, siga al igual que los demás medios masivos de comunicación, prestando todo el apoyo para robustecer aun mas la presencia de publico a los distintos espacios culturales de la ciudad.

Manifestar además mi asombro por las expresiones de agradecimiento de los directores de los diferentes grupos venidos de otras latitudes,  parecía estar escuchando a las candidatas de belleza de la Feria de Cali; algunas, niñas anónimas en sus países de origen que llegan y quedan ensimismadas con tantas atenciones, desconociendo la dura realidad a la que tenemos que enfrentarnos a diario los que hacemos gestión, para que entre otras cosas, no nos ocurra lo mismo que le sucedió hace unos días al Museo de Arte Moderno La Tertulia.

Para finalizar y a manera de sugerencia. Un contundente hecho teatral como el que acaba de ocurrir en esta paradójica ciudad, requiere con urgencia un buen equipo de curadores en la escogencia de los espectáculos a ofrecer en el próximo festival de teatro y evitar a futuro la desbandada de público, porque como dice el refrán popular, al perro no lo capan dos veces.

Álvaro Arcos.


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