Hace unos días el Teatro Romano de Mérida fue, a la vez, protagonista y testigo insustituible de un acontecimiento excepcionalmente emocionante. El polaco Grzegorz Bral, director artístico del Teatr Piesn Kozla de Wroclaw y flamante director del Teatr Studio de Varsovia, visitó la capital extremeña acompañado por los alumnos del Master en Interpretación impartido por la Universidad de Manchester.
La delegación foránea incluía tres profesores polacos y dos británicos, así como una docena de estudiantes procedentes de Finlandia, Italia, Estados Unidos, Grecia, Hungría, Inglaterra y Australia.
Bral correspondía de esta forma a la visita realizada en octubre de 2009 por el director del Festival de Mérida, Francisco Suárez, a Polonia, en la que ambos profesionales acercaron posiciones para una futura colaboración entre las entidades que dirigen. Y, como adelanto, regaló a los presentes en la escena romana -un reducido grupo de privilegiados turistas y trabajadores del conjunto arqueológico- un espectáculo impagable, una de las más nítidas muestras de teatro puro que nuestras retinas recuerdan sobre el manido ‘marco incomparable’. Los jóvenes aprendices de actores improvisaron en medio del frío que presidía la tarde y del agua que inundaba la ‘orchestra’ del Teatro Romano una escena del ‘Macbeth’ de William Shakespeare con cuyas representaciones en Londres, Manchester y Polonia concluirá su programa de estudios.
‘Brave’ Bral
Grzegorz Bral fundó en 1996, junto a Anna Zubrzycki, el Teatr Piesn Kozla, una compañía internacional compuesta por miembros del Reino Unido, Finlandia, Francia, Noruega, Suecia y Polonia, que posee un estilo muy personal de representar sus espectáculos, basado en el trabajo musical de la voz y en la profundización de las técnicas de movimiento escénico, lo que le ha llevado a colaborar con instituciones tan prestigiosas como la Royal Shakespeare Company. Asimismo, el grupo dirigido por Bral organiza desde 2005 el Brave Festival, un certamen consagrado a las ancestrales tradiciones culturales de todo el mundo. Como premio a la insobornable autenticidad de su trayectoria profesional, en enero de 2010 Bral fue nombrado director del Teatr Studio de Varsovia.
