Thomas Noone Dance estrena ‘Curts’ en Dansalona
La compañía Thomas Noone Dance estrena en el marco del ciclo Dansalona un nuevo espectáculo que ha denominado Curts, en el que ha contado con la colaboración de los coreógrafos Johannes Wieland y Ederson Rodrigues Xavier que han creado las coreografías Trespassing y Lapse, respectivamente. El programa de la nueva producción que presenta la compañía fundada en 2001 por el propio coreógrafo que le da nombre tras formarse en la Rambert School de Londres y bailar en diferentes formaciones de Holanda, Bélgica y España, se completa con la pieza Glitch creada por el propio Thomas Noone.
La sala saT! Sant Andreu Teatre de Barcelona acoge los días 16, 17 y 18 de septiembre el estreno de Curts el nuevo espectáculo de la compañía Thomas Noone Dance, que está integrado por obras de los coreógrafos Johannes Wieland, que tiene como asistente a Evangelos Poulinas, Ederson Rodrigues Xavier y Thomas Noone. Son tres creadores de diferentes procedencias y lenguajes ya que Ederson Rodrigues Xavier es brasileño, Johannes Wieland es alemán y Thomas Noone es británico. El elenco de este espectáculo está integrado por los bailarines Alba Barral, Horne Horneman, Paloma Muñoz y Javier G. Arozena, mientras que Nuria Martínez participa como ayudante de dirección de TND y la iluminación de Jaume Ortiz.
Ederson Rodrigues Xavier, que presenta Lapse, nació en Brasil, donde se formó en capoeira, afro jazz, danza clásica y contemporánea. En 1988 crea la compañía Quasar donde permaneció hasta 1992. Un año después se traslada a Holanda donde completa sus estudios en release e improvisación en la Escuela de Teatro de Amsterdam.
En 1994 empieza a colaborar con las compañías holandesas Leine&Roebana, Djazzex and Paul Selwyn Norton. En 1997 trabaja con el Frankfurt Ballet montando la pieza SubRosa de Norton. Desde 1997 hasta 2004 permanece en el Scapino Ballet de Rotterdam y allí inicia su carrera como coreógrafo con Quartet. A partir de ese momento coreografía regularmente para la compañía mientras trabaja con Krisztina de Chatel, Itzik Galili, Nanine Linning, Michael Shummaker, Gerard Mosterd, Suzy Blok, Georg Reischl y Roberta Marques. En 2003 gana el Swan VSCD Theater Dance Price por su reconocido estilo: apasionado, lírico y preciso.
Con sede en Ámsterdam, trabaja como coreógrafo independiente para compañías europeas. También imparte workshops en coreografía y técnica. Es intérprete en sus propias creaciones y en las de compañías como DudaPaiva Company (danza y marionetas) y Leine&Roebana.
El coreógrafo de la pieza Trespassing Johannes Wieland, por su parte, es director artístico y coreógrafo de la compañía del mismo nombre residente en el Teatro de Kassel, en Alemania. Formado en Alemania, fue bailarín principal en el Béjart Ballet de Laussane y en el Ballet de la Ópera de Berlín. Fundó una extensión de su compañía en 2002 en Nueva York. Ha desarrollado un singular trabajo con el cuerpo, apreciado por los principales críticos de los más prestigiosos medios. Su dueto shift ganó en 2004 el premio Kurt Joos en Alemania, y también ha ganado la Competición Nacional Coreográfica de Hubbard Street de Chicago en 2004.
Además de dirigir su propia compañía, Wieland es el director asociado de Paradigm (Nueva York) y es coreógrafo y profesor invitado en escuelas y compañías de todo el mundo.
Wieland y su compañía disfrutan compartiendo su trabajo y conocimientos con el público. Esto incluye su participación antes y después de las representaciones, demostraciones, ensayos abiertos y la enseñanza de diferentes estilos.
Thomas Noone, por último, contribuye en Curts con la pieza Glitch, una colaboración con el compositor esloveno Borut Kržišnik, quien ha creado numerosas obras para teatro, danza y cine, lo que le ha permitido trabajar con reputados artistas como el director Peter Greenaway, para quien creó la banda sonora de A life in suitcases.
Glitch es una investigación de los mecanismos que causan emoción en la audiencia. Se experimenta con la creación de secuencias y patrones que generan expectación para luego interrumpirlos o perturbarlos a través de la introducción de cambios bruscos en el tempo, numero de bailarines, ambientes, etcétera.
Glitch está concebido como un trío, con la interacción de una cuarta persona. En cuatro secciones alternadas se yuxtaponen partes gestuales rítmicas con partes sostenidas de danza física de contacto.
Glitch significa defecto o imperfección que causa error (es posible que derive del yiddish, usado para “resbalar”, o del alemán antiguo, usado para “planear”).
La elección de trabajar con Borut Krisnik ha sido fundamental en este proyecto debido a su habilidad de crear música utilizando métodos de yuxtaposición de textura y composición.
Thomas Noone ha firmado catorce producciones para su propia formación pero también otras para compañías como StopGap, Norrdans, Ballet de TGV o Dantzat. Desde que en 2001 crease su propia compañía ha participado activamente en el panorama de la danza de España actuando en festivales y programaciones regulares, y también ha ido desarrollando su trayectoria en escenarios internacionales.
Esta no es la primera ocasión en la que Thomas Noone invita a otros coreógrafos a trabajar con su compañía. En 2008 TND estrenaba Tort / The Chaos Quartet, un programa compuesto por una pieza propia, Tort, y otra de Guy Weisman y Roni Haver, directores de su propia compañía en Holanda, Club Guy & Rony. También en 2009 su compañía se embarcó junto con la sueca Norrdans en una extensa gira por Suecia con la obra Sunday Again del coreógrafo noruego Jo Stromgrem. La buena acogida de estas experiencias por parte del público, lo enriquecedor para directores y bailarines, ha animado a este nuevo proyecto colectivo con el que ofrecer al público diferente lenguajes y estilos en un mismo espectáculo.