Festivales

Titirimundi celebra en el Teatro Valle-Inclán sus primeros veinticinco años

El Centro Dramático Nacional presenta desde el 12 de mayo hasta el 19 de junio de 2011 en el Teatro Valle-Inclán y Plaza de Lavapiés de Madrid, una selección de doce espectáculos incluidos en el Festival Internacional de Títeres de Segovia-Titirimundi, evento que se desarrolla en la capital segoviana entre el 12 al 16 de mayo.

A lo largo de seis semanas, desde el 12 de mayo hasta el 19 de junio, el Centro Dramático Nacional y el Festival Internacional de Títeres de Segovia presentan en el Teatro Valle-Inclán un total de doce espectáculos procedentes de siete países distintos: Bélgica (Petits Miracles con El circo de las pulgas, Point Zéro con La escuela de los ventrílocuos y Plansjet con Las marionetas de Plansjet; Francia (Bakélite con Braquage y Anonima Teatro con La route); Alemania (Thalias Kompagnons con La flauta mágica y Les Voisins con La reina de los colores); Italia (Girovago e Rondella con Mano viva y El circo poético); Reino Unido (Rod Burnett con Punch and Judy), Dinamarca (Alex Barti con Mister Barti) y China (Compañía de Marionetas de Guangdong).

Los espectáculos Punch & Judy de Rod Burnett y La flauta mágica de Thalias Kompagnons abren la programación del 12 al 15 de mayo. La primera representa el más genuino representante teatro tradicional de títeres de guante del Reino Unido, mientras que la segunda presenta la historia del Príncipe Tamino, su amada Pamina, una Reina de La Noche al borde de la locura y el sádico Sarastro y que sitúa la acción sobre una mesa a la vista del espectador; las acciones de los titiriteros se proyectan a través de una cámara de vídeo en una pantalla sobre el escenario.

El circo de las pulgas de los belgas Petits Miracles y Braquage de los franceses Bakélite que se mostrarán del 19 al 22 de mayo toman el relevo en la programación. En el primero, Dominique Kerignard abre la más grande de las pequeñas carpas del mundo, adoptando la personalidad del intrépido domador Alfredo Panzani, que ha cambiado sus leones y sus elefantes por una exhibición de pulgas sabias, con las que recorre el mundo. Braquage (Atraco), por su parte, muestra, mediante diversos objetos de apoyo, un sencillo método para realizar un buen robo.

Del 26 al 29 de mayo se podrá disfrutar con Mister Barti del danés Alex Barti que se vale de un increíble expresividad para presentar la historia de Barti, un serio pianista clásico que es continuamente interrumpido por el titiritero. Durante estos días también se pondrá en escena el espectáculo presentado por las Marionetas tradicionales de Guangdong que acerca las originales y expresivas marionetas chinas de varilla que convierten a los espectadores en testigos de una serie de escenas basadas en la historia china y en los cuentos tradicionales.

Los franceses Anonima Teatro y los alemanes Les Voisins abren las representaciones de junio con los pases que ofrecerán entre el 2 y el 5. Los primeros presenta con La Route, un espectáculo de marionetas y de objetos ideado y presentado por un grupo de artistas formados en la escuela de teatro de Jacques Lecoq, mientras que Los Voisins presentan con La reina de los colores una fusión del teatro de sombras, música y vídeo y un gran aprovechamiento de recursos, para hablar de lo que ocurre cuando todo se vuelve gris, de la necesaria convivencia de unos y otros para que el mundo sea una fiesta donde jugar todos y donde un final feliz sea posible.

Del 9 al 12 de junio se pondrán en escena dos espectáculos presentados por los italianos Girovago e Rondella Family Theatre, El circo poético y Mano viva. El primero muestra una parodia del circo, con animales de gomaespuma y cartón-piedra, y la aplicación de técnicas de circo, como mimo, música, títeres, transformismo, malabares o acrobacia, mientras que Mano viva es un espectáculo de marionetas que cobran vida con los cinco dedos de la mano.

La programación se completa con las compañías belgas Plansjet y Point Zéro. La primera presenta con Las marionetas de Plansjet un original espectáculo popular de títeres bailarines concebido para la calle, participativo y para todos los públicos, para lo que se valen de tallas de madera tradicionales de Flandes, creadas por ellos mismos, que cobran vida al son de los variados instrumentos que tocan (gaita, zanfoña, flauta, tamboril…). Point Zéro completa el programa con L’école des ventriloques, obra realizada a partir de un texto de Alejandro Jodorowsky, autor que ha colaborado en la dramaturgia del espectáculo para dar vida a un montaje en la frontera de la risa, el mismo lugar donde la tragedia humana se convierte en algo grotesco. Un universo cercano a los evocados por Kafka o George Orwell, donde los actores manipulan títeres de tamaño humano, aunque a veces parece suceder lo contrario…


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