El Teatro Cervantes de Málaga acoge el estreno de ‘Homenaje a Antonio Molina’
Miki Molina y el torreño Rafa Garcel estrenan en el Teatro Cervantes de Málaga un «emotivo» Homenaje a Antonio Molina que reúne el cante, el baile y las imágenes para recordar a Antonio Molina, la voz de ‘Soy minero’. Tras su presentaciób en la capital de la Costa del Sol el espectáculo girará por Madrid, Barcelona, Albacete y Bilbao.
«Aviso a todo el mundo para que traigan kleenex, ya que el Homenaje a Antonio Molina es muy emotivo y aflorarán las lágrimas. También he avisado a mi madre, que estará presente, para que prepare una sábana». Miki Molina presentó esta mañana en el Teatro Cervantes el «espectáculo multidisciplinar» que se estrena en el coliseo municipal mañana jueves (2011/07/07, a las 21.00) y que protagoniza el torreño Rafa Garcel, cantante ligado a la voz de Soy minero por una anécdota curiosa que contó en la rueda de prensa y será también narrada en escena. «Me une a Antonio Molina una historia que también me liga emocionalmente a mi abuelo. Tenía puesta la cinta de Antonio Molina todo el día, y cuando mi abuelo murió no pude llorarle, por lo que éste es un homenaje también para él», dijo Garcel.
La ciudad de Málaga vio nacer a unas de las voces más prestigiosas de nuestra historia, la del gran Antonio Molina. Sus canciones han sido cantadas una y otra vez por numerosos artistas, pero ya había llegado la hora de que se le brindara un homenaje a su altura, en su ciudad, que narrara su vida con una ambientación especial, en la que colaborara su propio hijo, Miki Molina, y en la que el peso del cante lo llevara una voz especial, la de Garcel. El espectáculo Homenaje a Antonio Molina reparará esa deuda en un escenario también privilegiado, el Teatro Cervantes de Málaga. Después del estreno nacional el 7 de julio, la obra viajará a varias ciudades españolas en una gira de las que ya están confirmadas las representaciones de Madrid (el 18 de julio en el Teatro Coliseum), Benidorm (agosto), Barcelona y Albacete (a principios de septiembre), Bilbao, Ibiza, Coslada, San Fernando de Henares o San Sebastián de los Reyes. Asimismo, hay cerradas aunque a falta de confirmar fechas o teatros funciones en Murcia, Granada, Ávila y Córdoba, y la obra viajará también a América Latina.
«Es un espectáculo multidisciplinar, muy sencillo, como mi padre, pero a la vez muy potente por la música que presenta», comentó Miki Molina, que conoció a Rafa Garcel a raíz de un programa de televisión. «Había que encontrar una voz que recordara a la de mi padre –dijo el actor-, y ésa es la de Rafa Garcel. Cuando lo escuché por primera vez quedé muy impresionado. Rafa lleva algo de mi padre dentro, muy adentro. Tiene mucha verdad en su cante. Va a llegar a los corazones de todo el mundo». Molina hijo y Garcel presentaron esta mañana la obra en una rueda de prensa en la que estuvieron acompañados por Juan Carlos Martín, director del espectáculo; Damián Caneda. Concejal de Cultura del Ayuntamiento de Málaga, y José Ángel Nuna, de Producciones Faseo. La obra, que combina cante, baile, imágenes de época y audiovisual creado expresamente para la ocasión, cuenta además con la total aprobación de la familia Molina. De hecho, el apoyo de Miguel Molina ha sido determinante para que la idea original y los arreglos musicales, las coreografías y las proyecciones sean los más reales y cercanos al artista malagueño. Homenaje a Antonio Molina nos irá contando y cantando la epopeya de España en los años que Antonio Molina paseó su triunfo por medio mundo. Por ejemplo, Miki contará algunas anécdotas de su padre, como aquélla de cuando se marchó a Argentina, y se ofrecerán muchas imágenes de la España de la época.
El público recordará sus coplas, desde Soy minero hasta Adiós a España, pasando por El agua del avellano o Cocinero cocinero, en la voz de Rafa Garcel, que se apoyará en una pequeña dramaturgia trufada con numerosas anécdotas, danza e imágenes realizadas para la ocasión por José Luis de Damas (autor de Yo, Molina). La obra, un montaje de Faseo y Lobo Producciones, cuenta también con las coreografías y ballet de Lola González, la dirección musical y piano de Francisco Ramos y el libreto y dirección escénica de Juan Carlos Martín.
Rafa Garcel
Rafa Garcel nació en Málaga, al igual que nuestro homenajeado, en 1978. De su abuelo paterno recibió la motivación y la inspiración para interpretar canciones de Antonio Molina. En el transcurso de los años, Garcel ganó diversos concursos musicales y paseó con su voz por TVE, Telecinco o Canal Sur las coplas que ahora interpretará a lo grande en el estreno nacional del Homenaje a Antonio Molina. Está preparando su primer álbum, que se publicará en Navidad y está produciendo Óscar Gómez.
Miguel Molina
Miguel Molina debutó en el cine en 1980 con la película Maravillas, de Manuel Gutiérrez Aragón, y poco después protagonizaría 1919: crónica del alba, adaptación de la novela homónima de Ramón J. Sender. En 1987 apareció en uno de los papeles protagonistas de La ley del deseo, de Almodóvar, para luego repetir con Gutiérrez Aragón en Malaventura (1988). En 2002 comenzó su carrera televisiva con series como Lleno por favor (Premio de la Unión de Actores), ¿Quién da la vez? y Ana y los 7, entre otras. En teatro ha participado en obras como 5gays.com, Itaca, Tío Bob, etcétera.
Antonio Molina
Antonio Molina de Hoces (Málaga, 1928 – Madrid, 1992), menor de cuatro hermanos de una familia muy humilde, comenzó a trabajar a los diez años y, con catorce, se trasladó a Madrid para probar fortuna. Animado por todos los que encomiaban su voz, se presentó a un concurso de Radio España que le valió un contrato por tres años con el sello La Voz de su Amo, con el que grabó un primer trabajo con cuatro canciones en 1949, y firmar actuaciones con varias compañías. El éxito le llegó a principios de los cincuenta con canciones como «Soy minero», «Caballito bandolero», «La estudiantina» o «Adiós a España». Participó en varias películas, como El pescador de coplas (1953), Esa voz es una mina (1955), Malagueña (1955), La hija de Juan Simón (1956), Café de Chinitas (1957) o El Cristo de los faroles (1957). Triunfó en Latinoamérica, lo que no hizo más que confirmar la trayectoria ascendente de su carrera. Durante mucho tiempo estuvo unido a Juanito Valderrama al frente de numerosos espectáculos teatrales, en los que gozó de gran popularidad. Después de unos años de retiro, regresó de nuevo en 1986. En 1989 una fibrosis pulmonar le apartó definitivamente de los escenarios.
Antonio Molina creó un estilo propio de cantar copla basándolo, sobre todo, en la melodía de su voz cristalina, en unas portentosas facultades vocales y un falsete que prolongaba hasta límites insospechados.
Programa:
Entre mi abuelo y Molina, El macetero, María de los Remedios, Yo quiero vivir contigo, Yo quiero ser mataor, La hija de Juan Simón, Instrumental, Adiós a España, Cocinero, cocinero, De contrabando, Estudiantina madrileña, Ángela del alma mía, Soy minero y El agua del avellano.