Estrenos

La Machina estrena ‘Soliloquio de un fusilado goyesco’

El próximo viernes 29 de julio, a las 20:00 h., se inaugura en el Observatorio del Arte de Arnuero (Cantabria) una exposición consistente en una selección de grabados de la serie «Los Caprichos» de Goya. Con este motivo, La Machina Teatro realizará una intervención escénica estrenando su espectáculo «Soliloquio de un fusilado goyesco».

 

SOLILOQUIO DE  UN FUSILADO GOYESCO

«LOS CAPRICHOS»

«Pocas veces en la vida, generalmente ninguna, se le presenta a un hombre, ni tan siquiera a un artista, la oportunidad de expresar tan libremente sus ideas, sus enfados, su coraje y también su indignación ante el comportamiento humano y los vicios de la sociedad en general, y de la aristocracia y el clero en particular»

Francisco de Goya y Lucientes

Francisco de Goya y Lucientes llamó «Los Caprichos» a una serie de grabados cuyos originales realizó mediante una técnica mixta de aguafuerte, aguatinta y retoques de punta seca. En esa colección de 80 estampas, el pintor representó una sátira de la sociedad española de finales del siglo XVIII. Goya, mediante el ridículo, la extravagancia y la fantasía, censuraba los errores y vicios de la España de la época.

¡Ay, si viviera hoy, qué no pintaría!

En la primera mitad presentó los grabados más realistas y satíricos criticando desde la razón el comportamiento de sus congéneres. En la segunda parte abandonó la racionalidad y representó grabados fantásticos donde mediante el absurdo mostró visiones delirantes de seres extraños, deformando exageradamente las fisonomías y los cuerpos de aquellos que representaban las corrupciones y torpezas humanas, dándoles aspectos bestiales : EL SUEÑO DE LA RAZÓN PRODUCE MONSTRUOS.

Declarándose partidario de la Ilustración, el genial pintor se mostró contrario al fanatismo religioso, a las supersticiones, a la inquisición y a algunas órdenes religiosas, criticando todo ello humorísticamente y sin piedad en estas láminas. No obstante, el maestro fue consciente de los riesgos asumidos, y por eso a algunas de esas estampas las puso unos rótulos imprecisos, sobre todo en las sátiras de la aristocracia y el clero, y pretendió diluir el mensaje ordenando ilógicamente los grabados. A pesar de ello, y pasado un corto espacio de tiempo desde la puesta a la venta de los grabados en una perfumería situada en la calle del Desengaño, en el mismo portal donde tenía el pintor su vivienda, decidió Don Francisco retirar de la venta aquella primera edición. Pensó que su contenido satírico, irreverente y audaz no habría de gustar mucho a los celosos inquisidores y se adelantó así a un proceso que hubiera tenido peores consecuencias después de que el hecho fuera denunciado al Santo Tribunal. Goya ofreció al Rey, con destino a la Real Calcografía, las planchas originales, así como los 240 ejemplares disponibles, a cambio de una pensión vitalicia de doce mil reales para su hijo Javier.

Sobre «Los Caprichos» se ha escrito mucho, y es que cada uno los interpreta de una manera. Hay varios manuscritos que explican las láminas de los Caprichos. El que se encuentra en el Museo del Prado se tiene como autógrafo de Goya, pero parece más bien despistar y buscar un significado moralizante que encubra significados más arriesgados para el autor. Otros dos, el que perteneció a Ayala y el que se encuentra en la Biblioteca Nacional, realzan la parte más escabrosa de las láminas.

«SOLILOQUIO DE UN FUSILADO GOYESCO»

«Aquí estoy yo, destacando sobre todos, con mi camisa blanca y mis pantalones amarillos.

Aquí estoy yo, el que desafía a los verdugos.

Aquí estoy yo, como símbolo del que clama libertad.

Aquí estoy yo, simbolizando la valentía y la dignidad del que muere sin ocultar el rostro.

Aquí estoy, con mis estigmas en las manos, representando a Cristo.

Aquí estoy…»

Con motivo de la exposición en el Observatorio del Arte de Arnuero de una selección de grabados de la serie «Los Caprichos» de Goya, La Machina Teatro ha producido un pequeño espectáculo consistente en un monólogo protagonizado por un personaje del célebre cuadro «Los fusilamientos del 3 de mayo» o «Los fusilamientos en la montaña del Príncipe Pío». El hombre con la camisa blanca y los brazos en cruz, dos siglos después cobra vida para compartir ciertas experiencias con el público del siglo XXI.

Así, el actor interpretará tres papeles: el personaje del cuadro, el criado de Goya y el propio pintor. A través de ellos, se pondrá de manifiesto el origen del extraordinario realismo y de la profunda sinceridad de esa pintura. Se relatará cómo observó el artista los cruentos episodios que se representan en el cuadro y cómo tomó apuntes la misma noche en que acontecieron los hechos. Y se mostrarán las consideraciones que llevaron al maestro a la producción y posterior edición de «Los Caprichos».

Aunque es el trabajo interpretativo el protagonista del espectáculo, aquel queda complementado con un montaje musical formado por piezas de compositores contemporáneos de Goya: Schubert, Haydn y Beethoven.

FICHA ARTÍSTICA

Guión y dramaturgia

Luis Oyarbide

Francisco Valcarce

Actor

Luis Oyarbide

Jefe técnico

Víctor Lorenzo

Distribución

Rocío Tagle

Dirección

Francisco Valcarce

Músicas

– Franz Schubert. «Sinfonía nº 9. ‘La Grande'». Andande con moto

– Ludwig Van Beethoven. «Sinfonía nº 7». Allegretto

– Joseph Haydn. «Sinfonía nº 100. ‘Militar'». Allegretto


Mostrar más

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba