Tradicionalmente, el circo ha estado rodeado de un halo de magia, de poesía y acción. Quizá ésta sea una visión romántica. Pero cuando el público asiste al circo, aunque se quede extasiado con las habilidades físicas, manipulativas y mecánicas de un artista, siempre espera impregnarse de ilusión.
«Crece v20.11», que se presenta en el Circo Price de Madrid, transmite eso, magia, poesía y acción a partes iguales sin desdeñar algunas habilidades. En este sentido, cabe destacar el excelente dúo femenino sobre el trapecio, al igual que la mayoría de los ejercicios aéreos. En el suelo fascinan los juegos con las sogas y ese espíritu que, partiendo de un cuerpo inerte, levita como una seda de enorme exquisitez.
El montaje de esta cuarta edición de «Crece» coordinado por la escuela madrileña de circo Carampa, ofrece un espectáculo sorprendente en cuanto que compagina ejercicios físicos de magnífica factura con la danza, con el teatro, con la música y la palabra desde una perspectiva coral.
Y es que, a los consabidos ejercicios de habilidades, equilibrio, suspensión y potencia física individuales hay que añadir unas transiciones absolutamente hermosas y significativas. Los propios artistas son los encargados de instalar y desinstalar los aparatos con acciones que evocan historias urbanas. Son historias de encuentros y desencuentros, de alianzas y rivalidades, de parejas y de colectivos juveniles, de actividades lúdicas, de juegos de seducción. La danza se funde con el teatro compaginando arte, utilitarismo y sensibilidad.
La música y la iluminación proponen atmósferas cotidianas, otras subterráneas y mecanicistas, algunas mágicas, atmósferas siderales con vocación de volar. La palabra complementa el punto poético. «Los sueños sirven para caminar».
Desde el punto de vista estético «Crece v20.11» hay que enmarcarlo dentro del circo contemporáneo que incorpora diversas disciplinas donde la puesta en escena aporta un valor añadido a las tradicionales técnicas circenses. Algunos lo denominan nuevo circo, otros hacen referencia a su origen francés, canadiense, belga. En cualquier caso, estamos ante un circo con presencia dramatúrgica y carácter integrador.
Quizá el montaje carezca de cierta maestría en algunos números pero hay que tener en cuenta que la trayectoria de los jóvenes artistas está marcada por su reciente egresado de las escuelas profesionales de circo de todo el mundo. Desde esta perspectiva, el trabajo de los 15 artistas seleccionados hay que considerarlo en todo su alcance profesional tanto por el aspecto disciplinario y responsable como por la capacidad y actitud para la adaptación al conjunto. Teniendo en cuenta que estos artistas proceden de diversos lugares del mundo y solo han tenido un mes para coordinarse aportando alguna de sus posibilidades artísticas, el montaje no solo es digno sino precioso en la plástica y cabal en su ejecución.
Manuel Sesma Sanz
Espectáculo: «Crece v20.11» – Reparto: Artistas egresados de varias escuelas profesionales de diversos países – Coordinación: Escuela de Circo Carampa – Música: Laurent Delforge – Iluminación: Juan Carlos Menor – Dirección: Roberto Oliván – Lugar:
Circo Price de Madrid desde 21 de setiembre al 2 de octubre.
