La Fundición despide el año con variedad de propuestas creativas
La Sala La Fundición de Bilbao se enfrenta a los dos últimos meses de 2012 con una programación que contempla actividades que se engloban dentro del Festival BAD, del Proyecto Europa Inestable ‘Islotes en red’ – Identidad y por último dentro del Circuito de la Red de Salas Alternativas.
Desde el 1 al 4 de noviembre tendrán lugar las propuestas propias del BAD-Bilbao Antzerki Dantza. El día 1 el catalán David Espinosa representará Mi gran obra (un proyecto ambicioso) que tiene como objeto averiguar hasta qué punto puede mojarse la condición moral y física de la especia humana, poniendo a la vez un dique a las guerras, a las revoluciones y a los motines. Por su parte la portuguesa Vera Mantero escenificará, del 3 al 4, el Curso del silencio, una creación resultado de un proceso de escritura y rodaje sobre el trabajo de Maria Gabriela Llansol.
El resto de funciones de noviembre se enmarcan dentro del ‘Proyecto Europa Inestable Islotes en red – Identidad’, iniciativa co-financiada por la UE, coordinada por teatro de lo inestable y co-organizada por siete socios entre ellos La Fundición de Bilbao. Islotes en red se articula en torno a la temática de la identidad y cada una de estas creaciones suponen un posicionamiento respecto al tema. Provisional Danza presenta su trabajo La mujer invisible los días 1 y 2 donde exponiendo el cuerpo de una manera directa y clara; el día 9 se podrá ver El desencanto de Teatro de lo inestable de Valencia, montaje planteado como un viaje por distintas identidades, edades y lugares de encuentro de éstos y del 16 al 17 será el turno de João Garcia Miguel y As barcas. Del 23 al 24 se podrá ver Io sono fligio de Sanpapie Dance Company donde lejos de la psicología y de la autoreferencialidad, buscan el acercamiento a uno mismo y a su historia.
En diciembre tendrán lugar dos funciones, los días 15 y 16, de San Lorenzo Mártir de Teatro Xtremo, propuesta que forma parte del octavo Circuito de la Red de Teatros Alternativos en el que la compañía se basa en la inusual imagen de San Lorenzo desnudo que se retuerce sobre la parrilla mientras es asado. Sin importarles el mito, se centran en la percepción de la obra, utilizando códigos contemporáneos, componiendo un trabajo en el que mezclan acción, performance, vídeo y creaciones plásticas ejecutadas en un reducido espacio atiborrado de objetos que emula la urna en la que está la escultura. Proponen al público vivir, además, como un voyeur las actitudes íntimas que se desarrollan en 8 metros cúbicos.