La compañía de Salvador Távora, La Cuadra de Sevilla, recala del 10 al 27 de enero en los Teatros del Canal de Madrid con el espectáculo ‘Memorias de un caballo andaluz’, un espectáculo que rinde homenaje al mundo taurino y que gira en torno al caballo Cascanueces.
Los Teatros del Canal de la Comunidad de Madrid presentan el estreno en Madrid del espectáculo ‘Memorias de un caballo andaluz’, un montaje de La Cuadra de Sevilla dirigido por Salvador Távora, que estará en la Sala Roja del 10 al 27 de enero. El eje del espectáculo es un caballo, Cascanueces, que recuerda momentos de su vida relacionados sobre todo con las corridas.
Pero en este espectáculo todo es como un sueño en el cual se funden toros, hombres, mujeres, rituales, músicas, crueldad, ternura. Ese sueño se interrumpe a veces bruscamente, y la dureza de la vida cotidiana rompe la magia de la memoria. Este montaje, un sueño flamenco taurino, intenta acercar al espectador a la relación estética del caballo andaluz con todo cuanto significa su más popular entorno: su relación con la fiesta del toro, más concretamente con el universo de la corrida reglamentada, con sus tercios, su colorido, sus riesgos y su geometría.
Los cantes que se incluyen en la estructura poético-física de la obra están concebidos desde la cultura popular. Hay en el transcurrir de esta crónica del caballo andaluz todo un mundo de recuerdos: de plazas de toros, de caballos blancos y negros, de vestidos de colores, del cielo con flores y galones dorados, de guapas mujeres y de muerte.
Cascanueces es su nombre del caballo andaluz que protagoniza la representación y que tiene en el andar el olor de los mayorales de toros bravos: reposado, obediente, seguro en sus pasos, y siempre capaz de trotar por los terrenos encharcados en inviernos crudos y secos en calurosos veranos de dehesas perdidas en las marismas de Almonte. Es un caballo andaluz, cartujano, heredero de aquellos frailes jerezanos que les imprimieron belleza y personalidad campera y urbana. Cascanueces tiene el ímpetu de un desboque y la ingenuidad en el galope de un niño jugando a la rueda en una calle empedrada de cualquier pueblo blanqueado con cal.
Ficha artística:
Dramaturgia, coreografía y escenografía: Salvador Távora
Elenco: caballo Cascanueces, Jaime de la Puerta, Nacho Gómez (actor-bailarín), Rocío Suárez (bailaora), Manuel González (bailaor), José Ángel Salazar (bailaor), Raquel López (bailarina), Marisol Sánchez (bailarina), Ana Real (cantaora), Miguel Aragón (guitarrista), Rita Iglesias (violinista)
Regiduría y sonido: David Rial
Iluminación: Fernando Merino
Escenario: Manuel Jiménez
Sastra: Pepi Moreno
Creación: Salvador Távora
Vestuario y accesorios: La Cuadra y Carmen de Giles
Diseño de iluminación: Claude Corval y Fernando Merino
Proyecto del dispositivo mecánico: Enrique del Pozo Polidoro
Realización del proyecto escénico: Talleres Mecánicos Vega
Coordinación, asistencia a la dirección: Lilyane Drillon.
