Inquisición
Hay autores que tienen la satisfacción inmensa de disfrutar en vida viendo sus obras en los escenarios, representadas en multitud de ocasiones, acaso por su oportunidad, acaso por su comercialidad, acaso por su habilidad. Autores estos que una vez que fallecen se van diluyendo y poco a poco van desapareciendo sus obras de los escenarios y ellos mismos del recuerdo. Hay otros autores, en cambio, que difícilmente pueden ver sus obras en los escenarios, que nunca son representados, que sus personajes y sus historias tienen serias dificultades para ser disfrutadas por el público. En cambio, cuando abandonan este mundo son reconocidos y su obra pasa a los libros de Historia de la Literatura y del Teatro. Pero además de todos estos, hay muchos más, aunque me quedaré con Alfonso Sastre (Madrid 1926) por su singularidad. Alfonso es considerado ya hoy día un Maestro en vida, un Filósofo, un escritor brillante (Premio Nacional de Literatura, 1993), una Leyenda viva del Teatro (Premio Nacional de Teatro, 1985), marca y estandarte de toda una generación, un intelectual capaz de haber marcado un antes y un después en el Teatro español. Según palabras del propio Sastre “he escrito 84 obras para el teatro, contando unas cuantas versiones libres, que yo llamo dramatúrgicas, de otros autores” y continúa diciendo “pienso que desde que vivo en Euskal Herria, se ha representado una media de una obra mía…cada diez años”. El 6 de julio de 2012, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid se estrena “Lluvia de ángeles sobre París” escrita en 1994 por Alfonso Sastre, producida por la compañía de teatro Bululú 2120. Grupo de teatro de vanguardia creado durante la Dictadura que el propio Sastre define “como una especie de pequeño teatro guerrillero antifascista”. Antonio Malonda (Barcelona 1933) asume la dirección de escena. Malonda ha trabajado en muchas ocasiones en el País Vasco asumiendo direcciones de espectáculos producidos por compañías vascas como Geroa o Bederen Bat. Amigo y compañero de toda la vida en el teatro de Sastre siempre ha buscado y propiciado un Teatro comprometido y social. “Lluvia de ángeles sobre París” presenta unos ángeles rebeldes y utópicos, expulsados del Cielo que van cayendo sobre París. Expulsados porque quieren cambiar el Cielo y la Tierra porque no “comulgan” con la realidad que ven y plantean la que les gustaría. Ángeles que querrían realizar un cambio radical de valores. “Lluvia…” es un cuento en el que se crean situaciones muy divertidas a través de un humor inteligente, agudo, a veces absurdo y crítico. Un historia con connotaciones de Realismo Mágico Libertario y Revolucionario. Las dos anteriores obras de Alfonso Sastre que han sido escenificadas son “¿Dónde estás Ulalume, donde estás?”, dirigida en 2007 por Juan Carlos Pérez de la Fuente y “La Taberna Fantástica” dirigida por Gerardo Malla en 2009. Como podemos observar las obras de Sastre tienen dificultades para llegar a los escenarios. Aunque no es el único problema que tienen. Cuando por fin, se consigue que algún grupo de teatro produzca un espectáculo del autor de “Escuadra hacia la Muerte”, entonces aparece otro factor novedoso, que es la dificultad de que sea programado en los diferentes teatros. Pasan seis meses del estreno de “Lluvia de ángeles sobre París” hasta que consigue llegar a otro teatro distinto, en este caso en San Sebastián y al tercero en Hondarribia. Después, la nada, y la espera, y la incertidumbre. Por resumir: un dramaturgo genial al cual en contadas ocasiones le montan sus obras, tiene que asumir también que surjan dificultades a la hora de ser programadas. Cuando hay la oportunidad de acercar su obra al Público, no se aprovecha. Entonces, ¿qué ocurre?, ¿es casualidad?, ¿realmente no interesa?, ¿no interesa que se digan ciertas cosas?, ¿los escenarios no son espacios de libertad?, ¿no interesan las actitudes críticas?, ¿debe el Teatro dejar de cumplir con su función cultural y social?, ¿y política?, preguntas,…demasiadas preguntas. Hoy más que nunca se necesita un Teatro a la altura de los tiempos y de las circunstancias. Se abolió la “quema de brujas” no hace tanto. Hoy día existen formas más efectivas y eficaces de ocultar, ningunear y asfixiar la disidencia. Ya hace unas cuantas décadas que existe una forma moderna de… Inquisición.