¿Dónde está Cervantes?
Joglars, sin Boadella y capitaneados por Ramon Fontserè, regresan al Teatro Principal de Zaragoza para presentar su último espectáculo, ‘El coloquio de los perros’, adaptación libre de la novela homónima de Cervantes. Tan libre, que resulta muy difícil reconocer al escritor complutense y uno pensaría, de no haber leído antes el texto cervantino, que don Miguel era aburrido. Pero no es este el principal problema de la propuesta escénica de Joglars. El artista puede invocar su libertad para interpretar como quiera el texto que va a llevar a escena, aunque en casos como este, en el que se cuenta con la coproducción de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, se pueda esperar cierto grado de rigor. Es la manera en que se construye el discurso escénico lo que despierta serias dudas.
Cipión y Berganza (alter ego del propio Cervantes y aquí reconvertida en chucha) son dos perros que reciben durante un día el don de hablar. Aprovecharán esa extraordinaria facultad para contar a Manolo, el vigilante nocturno, las vicisitudes de su vida y cómo han llegado hasta la jaula que ocupan en la perrera.
La dramaturgia, algo bastante más profundo que una intervención sobre el texto o una simple adaptación, debe colocar en su lugar los materiales textuales y escénicos para descubrir los significados complejos del texto, dibujando el camino para la representación. Es este caso resulta en exceso simplista y superficial. El personaje del vigilante (primera gran duda) habla con los perros, hace funciones de narrador para con el público y maneja un humor tan vano y elemental como hacer chistes con la capacidad de procreación de los Ruiz-Mateos. Dudas que también encontramos en la escena de la esterilización de Berganza o en el final protagonizado por los “animalistas” liberadores de perros y gatos.
La puesta en escena tiene el aliciente de las máscaras, pero en conjunto resulta plana y reiterativa en exceso. Hay alguna escena destacable (la del collie y la pequinesa), pero el conjunto es poco atractivo, despierta pocas emociones, carece de mordacidad y se acerca peligrosamente a lo aburrido. La escenografía está bien resuelta, hay un buen diseño de luces, y como es habitual en Joglars, un notable trabajo interpretativo.
Pese a los prolongados aplausos del público, el resultado es francamente decepcionante.
Joaquín Melguizo
Publicado en Heraldo de Aragón 27 de octubre de 2013
Obra: EL COLOQUIO DE LOS PERROS
Adaptación libre a partir de la novela de Cervantes.
Dramaturgia: Albert Boadella, Martina Cabanas y Ramon Fontserè.
Produce: Compañía Nacional de Teatro Clásico/Joglars.
Intérpretes: Xevi Vilá, Ramon Fontserè, Pilar Sáenz, Dolors Tuneu y Xavi Sais.
Escenografía: Albert Boadella y Ramon Fontserè.
Iluminación: Bernat Jansá.
Espacio sonoro: Xevi Sáenz y Carles Cases.
Dirección: Ramon Fontserè.
Teatro Principal de Zaragoza.
25 de octubre de 2013
