Muxua
Lorenzo tiene quince años. En la escuela se enamora de Antonio, un joven que no sabe cómo reaccionar ante el afecto de Lorenzo. Una profesora, Elena, testigo de una situación que se le escapa, que quiere pero no sabe gestionar. En el centro… un beso, capaz de dar rienda suelta a la locura. Tanttaka se atreve a adaptar y llevar a escena esta novela del escritor italiano Iván Cotroneo.
Ivan Cotroneo guionista, director de cine, traductor y escritor napolitano. Tras abandonar la carrera de Derecho en 1990, se trasladó a Roma a estudiar guion en el Centro Sperimentale di Cinematografia. Un beso es una joya literaria llevada también al cine por el propio autor. Un baccio es una dramática historia de un amor imposible. Historia capaz de cautivar por la fuerza que tiene, y capaz de tocar, mover, abrumar al lector. ¿Quién podría haber previsto lo que sucedería? ¿Quién podría creer que un beso se convertiría en un gesto, en acción, en violencia irracional? Detrás de cada crimen nunca hay un solo culpable. Novela en tres voces que cuenta una historia cruel de amor, de odio y de violencia.
Muxua se estrenará en su versión en euskera el próximo día 23 de junio en San Sebastián. Tres voces, tres monólogos, tres protagonistas, tres puntos de vista cruzados para contar una historia cruel con una honestidad emocional y sin ningún tinte moralizante. Se habla sobre muchas cosas, se ponen en cuestión muchos aspectos que todavía la sociedad de hoy día no ha sido capaz de solucionar: la homofobia, el bullying, la incapacidad de la escuela para solventar problemáticas… Fernando Bernués firma la dirección escénica de Muxua. Según palabras del director la manera de respirar de las ciudades crea o no espacios habitables más propicios para solucionar y esclarecer los problemas.
En esta historia nada es blanco ni nada es negro. Cada personaje lleva su dolor, su pena y una incapacidad de buscar la salidas adecuadas a sus propias vidas para continuar viviendo. ¿Cómo ayudar a los demás si somos incapaces de ayudarnos a nosotros mismos? La historia discurre por unos territorios de cotidaneidad. Cotroneo con muy poco cuenta mucho. Un beso es un espejo que nos refleja la falta de empatia, la dificultad de ponernos enfrente para entender lo que pasa y entender a los demás y de esa manera a nosotros mismos. Habla de los perjuicios, de la presión social, de lo correcto, de la vergüenza, del miedo a amar, de la huida, … ¡Es tan difícil contar las cosas en 55 minutos! ¡Es tan difícil contarlas tan bien!
Un beso es sencillez, sensibilidad, poesía… El elenco lo componen Mireia Gabilondo, y dos jóvenes promesas en los papeles masculinos, Ander Iruretagoiena y Haritz Morrás que afrontan su primer trabajo profesional. Un beso se enmarca en una línea artística de teatro de cercanía, de teatro sin teatro, de propuestas de proximidad, de teatro de autor en espacios no convencionales con unas condiciones técnicas reducidas a su más mínima expresión. Lo que no hay que confundir con descuido o con precariedad. Línea artística ya abierta por Tanttaka que ha dado frutos como Blacbird, también estrenada en el Teatro Victoria Eugenia. Muxua contará con una versión en castellano a estrenar a lo largo de este año 2015. Sigamos de cerca está producción o, en su defecto la versión en castellano. Espero y deseo que sea todo un éxito porque este tipo de propuestas son tan necesarias… son tan importantes… En fin…
un beso