Cambio de rumbo en la 4ª edición del madrileño Frinje
Frinje Madrid estrena nombre en su 4ª edición, pasando de Fringe a Frinje, como un guiño a la particular y reconocible pronunciación con que suele llamar al festival el público madrileño. Organizado por el Teatro Español, se celebrará del 3 al 25 de julio en distintos espacios de Matadero Madrid.
Con el cambio de nombre llega también un cambio de rumbo para el Frinje, donde los procesos creativos y la reflexión sobre la escena conviven y se entrelazan con la exhibición, reivindicando un diálogo activo entre creadores y espectadores, entre realidades y utopías (o distopías) y entre vanguardia y tradición. En la presente edición, se reduce el número de espectáculos, apostando por la calidad y aumentando su implicación en los procesos creativos con laboratorios, seminarios, talleres, lecturas dramatizadas, actividades para niños, vermús literarios y mesas redondas. Así, los 31 proyectos seleccionados recibirán este año un importe que duplica al de ediciones anteriores.
El festival propondrá este año nuevos enfoques artísticos en los que englobar a las propuestas de este año: La actualidad a escena (con compañías que utilizan las artes escénicas para lanzar preguntas que nos descubren qué late bajo la realidad, estimulando así el pensamiento crítico); Creación en grupo (con montajes nacidos en salas de ensayos, fruto de la reflexión común y el diálogo y que, desde ópticas diversas, analizan el ser humano, la sociedad contemporánea y sus miedos); Cuerpos en movimiento (con piezas que nacen a partir del cuerpo y su movimiento, de sus límites y posibilidades escénicas); y Otros enfoques y Experiencias singulares (con propuestas que nos invitan a examinar nuestro pasado inmediato, el ritmo de nuestro día a día y a construir otros mundos posibles).