Lluís Pasqual dirige a Rosa Maria Sardà y a Míriam Iscla en dos monólogos de Stefano Massini
El Teatre Lliure de Barcelona abre su nueva temporada con dos piezas del italiano Stefano Massini. Ambas representadas en catalán, ‘CrecEnUnSolDéu’ trata de la vida cotidiana en la Franja de Gaza, y ‘Dona no reeducable’ de la periodista Anna Politkóvskaya, asesinada en el año 2006 por estar en contra del posicionamiento ruso en el conflicto checheno. Las funciones se alternarán durante el mes de septiembre.
‘CrecEnUnSolDéu’ con Rosa Maria Sardà, del 22 de septiembre al 11 de octubre
En palabras de Lluís Pasqual: «Éste es un texto recién salido del horno que llegó a mí unas pocas semanas atrás. Ese mismo día fui a ve a Rosa y se lo leí. A la mañana siguiente empecé a traducirlo. En pocos días, milagrosamente, se liberaba un hueco del calendario comprometido desde hacía mucho tiempo y CrecEnUnSolDéu se incorporó a nuestra programación del próximo año. Todo ha sucedido como si fuera una simple evidencia. Ni yo recuerdo el momento en el que decidí hacerlo, ni haberlo propuesto formalmente a la Sardà, ni… Era un texto esperado. Y Stefano Massini, por suerte para nosotros, lo ha escrito. Como tantas veces, el teatro se plantea preguntas en voz alta sobre un tema que nos afecta, que nos conmueve día tras día y al que la mayoría de las veces no tenemos respuesta. ¿O alguien cree poseer las respuestas a las preguntas que explotan todos los días, en carne viva, en este pedazo de tierra milenaria denominada Franja de Gaza? ¿Alguien sabe qué más decir? O, simplemente, ¿qué decir?».
‘Dona no reeducable’ con Míriam Iscla, del 23 de septiembre al 3 de octubre y del 15 al 22 de junio
En opinión de Lluís Pasqual: «La curiosidad por Stefano Massini, esta nueva voz del teatro europeo, me llevó en muy pocos días a ponerme en contacto con él, a leerme sus textos que no conocía. El autor que ha deslumbrado a los espectadores esta temporada con Lehman Trilogy escribió hace tres años, en homenaje a la periodista rusa Anna Politkóvskaya, asesinada por el denominado terrorismo de estado, un texto: Mujer no reeducable. Me pareció que con este segundo monólogo, también extraordinario, y que también tenía el rostro y la voz de una actriz, Míriam Iscla, podíamos enriquecer todavía más este nuevo diálogo de nuestros espectadores con el autor. Y de este modo, hemos hecho lo que antes se llamaba un programa doble. Decisiones casi sobre el terreno, como parecen haber sido escritos los dos textos de Massini. Teatro de urgencia. Urgentes. Necesarios.»