El Teatro Arriaga acoge ‘Kreditua’, obra de Jordi Galcerán con versión en euskera de Aitziber Garmendia
Dirigida por Fernando Bernués, Zuhaitz Gurrutxaga y Joseba Apaolaza protagonizan ‘Kreditua’, versión en euskera que Aitziber Garmendia ha realizado de la obra ‘El crédito’ de Jordi Galcerán. Se llevarán a cabo tres funciones, una matinal el día 29 de octubre a las 11:00 y dos vespertinas, el 30 y 31 a las 20:00 horas.
El Teatro Arriaga acoge a partir del 29 de octubre y hasta el día 31 ‘Kreditua’, tragicomedia del dramaturgo catalán Jordi Galcerán protagonizada por Zuhaitz Gurrutxaga y Joseba Apaolaza. Se trata de la versión en euskera que ha realizado Aitziber Garmendia de la obra ‘El crédito’, que ya fue representada en el propio Teatro Arriaga en septiembre de 2013. Ahora son Zuhaitz Gurrutxaga y Joseba Apaolaza quienes, bajo la dirección de Fernando Bernués, interpretan los papeles que Carlos Hipólito y Luis Merlo hacían en la obra en castellano. El público podrá disfrutar de tres representaciones de la obra. La primera será matinal, destinada sobre todo a escolares, y las otras dos, abiertas al público en general, se ofrecerán por la tarde, el viernes 30 y el sábado 31, a partir de las 20:00. Esta nueva producción de Tanttaka está dirigida por Fernando Bernués, director habitual de la compañía, quien mantiene su sello personal, caracterizado por la cuidada estética de la representación y la apuesta por la emoción en las interpretaciones de los actores.
Sinopsis
Si eres director de una sucursal del banco, sabrás muy bien hasta qué punto se pueden enredar las cosas. Hasta ahora, en nuestro mundo civilizado, el que necesitaba dinero solía recurrir para pedir un crédito. Normalmente se lo concedían. Y cuando no se lo concedían, se callaba y volvía a casa cabizbajo, pensando que las cosas estaban fatal, pensando que no había crédito, y dejaba en paz al banquero. Pero hoy en día no te puedes fiar. Si niegas un crédito a alguien, a lo mejor no volverá con las orejas gachas a su casa. Se plantará delante de ti, te mirará a los ojos, y te dirá que ahora él tiene las riendas del asunto, y que si no le das el dinero tomará medidas, y no cualquier medida. No usará la violencia, claro, pero si no le das la pasta, quién sabe si cumplirá su amenaza y hará eso que puede llevar tu vida al fracaso más absoluto.