Estreno de ‘Lurrak’, circo contemporáneo vasco con música en directo
Los ayuntamientos de Vitoria-Gasteiz y Bilbao, a través de sus festivales de teatro de calle Kaldearte y Kalealdia, presentan un encuentro entre el teatro, el circo y la música: ‘Lurrak’. Cinco intérpretes multidisciplinares y cuatro músicos que dominan instrumentos autóctonos se ponen al servicio del prestigioso clown, actor y director de circo y teatro Adrián Schvarzstein en esta propuesta que se estrenará el 10 de junio en el mencionado festival gasteiztarra. Kalealdia, por su parte, ofrecerá el montaje dentro de su programación el día 27 del mismo mes. Su estreno en sala está previsto para el 1 de noviembre, dentro del marco del Festival Internacional de Teatro de Santurtzi.
«Un espectáculo sin precedentes en la escena contemporánea vasca, tanto por su dimensión, como por su tipología». Así se presenta ‘Lurrak’, montaje cuya intención es unir la música y el teatro-circo, dando al espectáculo la frescura de la música en vivo y la posibilidad de mezclar disciplinas artísticas para que el público viva una experiencia totalmente nueva. Se trata de un montaje para todos los públicos, que podrá ser visto en todas partes, ya que a pesar de que en algunos momentos se utilicen varias palabras en euskera, serán fácilmente comprensibles a través de los gestos que las acompañen. «La dramaturgia del espectáculo hará hincapié en las diversas posibilidades de los artistas circenses y en destacar, gracias a sus habilidades, la historia que vamos a crear. El espacio escénico, así como la sala donde el público estará situado serán parte integral del espectáculo. Personajes bien definidos, con sus manías y obsesiones, que comunicarán, a través de la música y el circo, emociones universales que sabrán llegar a un público no sólo adulto sino también familiar», explican. Además de divertir y entretener, quieren ofrecer un valor educativo y artístico «con el que la cultura vasca saldrá ganando una vez más, aportando su granito de arena».
La historia se sitúa en una fábrica que, aunque podría encontrarse en cualquier lugar del mundo, quiere trasladar al público a aquella época en la que la industria poblaba los alrededores de la Ría de Bilbao. Debido a diferentes conflictos y a una creciente tensión con el jefe, los trabajadores de esta fábrica, interpretados tanto por los músicos como por los actores, deciden iniciar una rebelión. «Todos los personajes viven en el mismo lugar, pisan la misma tierra y, a pesar de sus diversidades, pertenecen a la misma sociedad que los enmarca. Pero por algún motivo no logran encontrarse, más bien se alejan, las parejas se dividen, los seres no se comunican, no crean puentes y reina una alienación cada vez más opresiva».
Los artistas circenses Ortzi Acosta, Izaskun Agirresarobe, Gaizka Chamizo y el dúo catalán formado por Marc Muñoz y Nuria Puig encarnan a estos personajes. Los acompañan además los músicos Mikel Hernández y Anai Gambra (txalaparta), Unai Laso (trikitixa) y Roberto Castro (alboka, entre otros), quienes interpretarán sus melodías en directo. «Creemos que los espectáculos de teatro-circo deben tener música en vivo. Por eso, la parte musical, su ejecución, los personajes-músicos en escena son importantes y tendrán una presencia teatral y artística fundamental». En cuanto a la escenografía, estará relacionada con la Tierra, con un fuerte impacto visual y emocional, «casi como una escultura de Chillida».
Proceso de creación
«Queremos realizar este proyecto para dar una vez más oportunidades reales, sean artísticas o laborales a una generación cada vez más preparada y creativa en el mundo del teatro-circo». Así, en febrero de 2015 se lanzó una convocatoria de cásting en Bilbao y Gasteiz para seleccionar a los artistas que participarían en el espectáculo. A partir de ahí, el equipo ha realizado cuatro residencias que han ido gestando esta propuesta. Después de presentarse en territorio vasco, la producción tiene el objetivo de girar por espacios internacionales. «Creemos que uno de los temas importantes es darle al espectáculo universalidad, que se pueda ver y representar en cualquier parte del mundo, comunicando y emocionando a públicos de cualquier cultura y país».