La SubTerránea estrena ‘Como las cosas amables’ en La Rambleta
Del 31 de mayo al 2 de junio se presenta en La Rambleta (Valencia) el último proyecto de la compañía La SubTerránea, ‘Como las cosas amables’, un espectáculo en el que participan personas de diferentes colectivos (personas mayores, personas con enfermedad mental y alumnos de teatro).
La compañía La Subterránea estrena ‘Como las cosas amables’, un espectáculo en valenciano y castellano creado dentro del marco de Graneros de Creación, para el cual cuentan con la colaboración de Ana Lacruz. Los principales protagonistas tanto a nivel creativo como interpretativo son personas que provienen de diferentes colectivos. Para ello se ha contado con asociaciones como ACOVA (Asociación de ayuda a personas con enfermedad mental de la Comunidad Valenciana), Hogares Compartidos (Hogares Compartidos es un programa de acompañamiento social en viviendas tuteladas con supervisión puntual para personas mayores: pisos para personas de la tercera edad o con escasos recursos económicos, principalmente pensionistas, en Valencia) y La escuela del Actor (Estudiantes de Arte Dramático).
Se trata de un resultado de un proceso de creación colectiva que investiga sobre los límites, los horizontes, el acompañamiento vital y la diversidad. Una catarsis colectiva donde la poesía, las imágenes más evocadoras y surrealistas y los temas sociales más candentes, van desfilando frente al espectador a ritmo de la los golpes de una grúa demoledora sobre una plaza en obras. Mientras tanto, los intérpretes se dirigen irremediablemente hacia un lugar común. El final. «Somos civilizados, miradnos, sonrientes, amables, y por qué no decirlo bastante guapos ¿no? Sonrisas de dientes blancos, de caries mentirosas, sí, pero sonrisas, sonrisas para vosotros… «.
Sinopsis
Cierra los ojos. Imagina catorce personas con diferentes nombres y apellidos dirigiéndose hacia el final. Un horizonte en obras, apenas visible, demolido por la grúa del buenismo y la contaminación.
Abre los ojos y deja de imaginar. Ahí están esos catorce pares de pupilas inquietas, renacentistas, en patinete, en chándal o con móvil. Precipitándose al vacío de unos ojos que les miran fijamente. A veces reciclan y dicen toda la verdad; otras son republicanas o no y son mentirosas.
Estamos en la terraza de un bar y es primavera.
¿Cómo pedimos la tortilla, con cebolla o sin cebolla?