«Un ministro que no entiende cómo funciona el sector no merece ser un Ministro de Cultura»
La Unión de Actores y Actrices considera que la comparecencia del Ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, es una muestra más de que la cultura en el Estado español no se toma con la seriedad que se merece. El sindicato opina que el Gobierno abandona al sector, que representa el 3 por ciento del PIB, «a su suerte», tras declarar que no tomará medidas específicas para sus profesionales.
Unión de Actores y Actrices
La Cultura no necesita medidas a posteriori, necesita medidas ya, con urgencia, porque más de 700.000 personas que pertenecen al sector cultural no podrán acceder a prestaciones por desempleo porque, además de cercenarles su trabajo, se les va a privar de pagar sus facturas o hacer la compra. Entre esas personas se encuentran las actrices y los actores que, por si a alguien se le ha olvidado, forman parte del tejido de la industria cultural del país.
El Ministro de Cultura del Gobierno de España, José Manuel Rodríguez Uribes, ha comparecido para decir que no iba a haber un paquete de medidas específico para el sector cultural. Una comparecencia que llega tarde, ya que hace más de dos semanas que el señor Rodríguez Uribes tiene sobre su mesa las medidas que se diseñaron desde la Unión de Actores y Actrices, así como desde las de otras organizaciones y asociaciones artísticas; y mal, porque no se está teniendo en consideración un sector que se ahoga poco a poco, día a día, y que ve como según van pasando las semanas no se toman medidas específicas para sus trabajadores y trabajadoras. En este sentido, el sector se siente abandonado y ultrajado por parte del Estado, que no contempla su más importante características para tomar medidas: la intermitencia.
Después de reunirse con los diferentes actores del sector con llamadas telemáticas, se podía intuir un horizonte de esperanza, pero ese vestigio se ha visto tapado por un duro golpe. Los intérpretes no quieren un trato especial, ni a favor, quieren tener los mismos derechos que el resto de trabajadores y trabajadoras, solo que su forma de trabajar y cotizar es diferente al del resto, por lo tanto, sus medidas también tienen que ser distintas.
Las actrices y los actores siempre son sensibles a este tipo de situaciones, saben que las vidas humanas que se están perdiendo son importantes, es importante salvar a las personas, las vidas de familiares y amigos que también sufren esta crisis; es importante agradecer a sanitarios/as, transportistas, cajeros/as, reponedores/as y un largo etcétera de personas que hacen posible que los intérpretes y sus familias sobrevivan a esta crisis. No obstante, las personas que viven de la interpretación también lo sufren, su gente más cercana también lo sufre, así que también es importante que las actrices y los actores puedan sobrevivir a esta crisis, igual que el resto de la sociedad y el tejido económico del país, como parte de él, ni más ni menos importantes que el resto.
Otros países ya han tomado medidas para la cultura de sus respectivos estados, sin ir más lejos el Ministro de Cultura francés ha señalado que Francia tiene «que poner todo en marcha para asegurar la supervivencia de los agentes culturales, es el porvenir del modelo cultural lo que está en juego». Este es el modelo que España necesita para no hundir aún más a un sector precarizado y dónde el presupuesto gubernamental es escaso. En este sentido, seguir aplazando la actuación del Ejecutivo es inadmisible y demuestra el poco interés por la Cultura. Un ministro que no entiende cómo funciona el sector no merece ser un Ministro de Cultura.
«Si el Ministerio de Cultura no toma medidas específicas con urgencia se nos está dejando atrás en las medidas de protección del Gobierno a los trabajadores y las trabajadoras por el mero hecho de ser intermitentes y nos está llevando directos a la deriva», señala tajante el Secretario General de la Unión de Actores y Actrices, Iñaki Guevara.