MANUEL CALZADA PÉREZ
(Granada, 1972)
¿Cómo acaba un arquitecto escribiendo un texto dramático sobre María Moliner? Manuel Calzada Pérez dio sus primeros pasos en el teatro de la mano de Josefina Molina, para la que firmó en 2002 la escenografía de La Lozana Andaluza. El paso por la escenografía era casi natural para un arquitecto, y Manuel siguió por ese camino con su propuesta de Simón Boccanegra, estrenada en 2003. Sin embargo, en los ensayos de La Lozana Andaluza ocurrió algo imprevisto: sentado en su silla de equipo artístico, Manuel atendía con fascinación a la puesta en escena de la Molina y terminó por contagiarse del virus del teatro. Unos cuantos proyectos de arquitectura y una tesis doctoral después Manuel no había olvidado ese virus que escocía y tuvo la fortuna de entrar a trabajar como ayudante de José Carlos Plaza, con el que ha aprendido casi todo lo que sabe de teatro. Mientras tanto, ha escrito varios textos dramáticos, entre otros «El diccionario». Si se atiende a las definiciones del María Moliner se comprobará que no es tan extraño que un arquitecto proyecte una estructura, aunque sea dramática, y que esta estructura termine construyendo una obra, en este caso sobre la vida de María Moliner y en un escenario.