Marie de Jongh utiliza en esta pieza la máscara cero, un tipo de máscara que va más allá de la neutra y que carece de rasgos que la humanicen.
La compañía bilbaína Marie de Jongh estrena el 26 de febrero en el Teatro Barakaldo ‘Ama‘, una propuesta de gran formato que, a pesar de dar continuidad a proyectos anteriores como ‘Amour‘ o ‘Izar/Estrella‘, se dirige a un público adulto a partir de los 12 años. La obra parte de un trabajo de investigación que comenzó hace tres años, en el que la compañía empieza a utilizar la máscara cero, un tipo de máscara que va más allá de la neutra y que carece de rasgos que la humanicen. La elección busca precisamente dejar a los personajes en los límites de la deshumanización, una frontera que muchas personas visitan en diferentes momentos de sus vidas, más allá de la cual está lo terrible, lo que da temor, la locura, en definitiva.
En ‘Ama‘ se habla de la fortaleza de unas personas frágiles y asustadas, combinando crudeza con onirismo, lo cotidiano con lo imaginario, lo absurdo con lo trágico en una reivindicación del cuidado mutuo entre los seres humanos y del cuidado de nuestros mayores. La propuesta cuenta con la coproducción del Teatre Nacional de Catalunuya, el Opéra Grand de Avignon, el Laboratorio de las Artes de Valladolid y Donostia Kultura.
En cuanto al equipo artístico, Jokin Oregi firma la autoría y dirección de esta obra interpretada por Ana Martínez, Javier Renobales, Anduriña Zurutuza, Maitane Sarralde, Joseba Uribarri, Amets Ibarra y el propio Jokin Oregi. Pablo Messiez ha realizado el acompañamiento externo de la pieza y Ana Meabe la ayudantía de dirección. Además, la escenografía y el vestuario han corrido a cargo de Elisa Sanz e Ikerne Giménez, la música a cargo de Adrián García de los Ojos, el diseño de iluminación es de Felipe Ramos, la iluminación de Kandela Iluminación, la construcción de escenografía de Mambo Decorados, la confección de vestuario de Inmaculada Gómez y la producción ejecutiva de Pío Ortiz de Pinedo con la ayudantía de producción de Nagore Navarro.
Esta es la octava producción de Marie de Jongh, que atesora en su trayectoria reconocimientos como el Premio Feten 2020 al Mejor espacio escénico por ‘Ikimilikiliklik‘, el Premio Nacional de las Artes Escénicas para la Infancia y la Juventud 2018, el Premio Max al Mejor espectáculo infantil o familiar 2017 por ‘Amour‘, el Premio Ercilla 2015 a la Mejor Producción Vasca por ‘Amour‘ o el Premio Tournesol 2015 del Festival de Avignon al Mejor espectáculo infantil por ‘Kibubu‘.
