Es una coproducción del Teatre Nacional de Catalunya y el Teatro Nacional de São João de Oporto y se puede ver en Barcelona a partir del 29 de septiembre
‘Ensayo sobre la ceguera’, una de las novelas más reconocidas de José Saramago, ya tiene su adaptación teatral. Con dramaturgia de Clàudia Cedó y dirección de Nuno Cardoso, la obra es una coproducción del Teatro Nacional de Catalunya y del Teatro Nacional de São João de Oporto. Tras estrenarse en Oporto este verano, del 29 de septiembre al 30 de octubre inaugurará la Sala Grande del TNC. Posteriormente, podrá verse en el Theatro Circo de Braga (el 25 y el 26 de noviembre) y en el Teatro Aveirense de Aveiro (el 3 de diciembre).
La producción cuenta con medio reparto catalán y medio reparto portugués: Ana Brandão, Paulo Calatré, Ferran Carvajal, Jordi Collet, Sérgio Sá Cunha, Montse Esteve, Paulo Freixinho, Adriana Fuertes, Gabriela Flores, Pedro Frías, Mafalda Lencastre, Jorge Mota, Albert Prat, Lisa Reis y Maria Ribera. El espectáculo se interpreta en las dos lenguas y con subtítulos.
En el centenario del nacimiento de José Saramago, Premio Nobel de Literatura en 1998, dos teatros europeos se unen para llevar a escena uno de sus libros más conocidos: ‘Ensayo sobre la ceguera’. La obra cuenta cómo una pandemia se extiende por todo el mundo: una plaga de ceguera inexplicable e incurable. El gobierno aplica restricciones cada vez más represivas e inútiles para intentar frenar el contagio. La falta de recursos y las condiciones extremas harán que la gente luche por sobrevivir pero únicamente lo conseguirán los más inmorales.
El director Nuno Cardoso explica que habló con Carme Portaceli de hacer algo juntos y salió el nombre de Saramago. “Pero me pareció demasiado grande, demasiado cercano, demasiado arriesgado. Cuando salí al balcón a fumar un cigarrillo, en la plaza un indigente estaba hablando con Dios y el resto iba a la suya, como si no pudieran verlo y mucho menos oírlo. Allí fue cuando lo tuve claro, y mirando a Carme le dije: La ceguera. Han pasado dos años desde aquella conversación, dos años muy difíciles. Lo que en
principio parecía una parábola sobre la condición humana en un escenario inverosímil, ahora es nuestro día a día. El miedo, la pérdida, la impotencia, la esperanza y la libertad se habían hecho muy presentes. Era como si, en lugar de leer, estuviera recordando”
