Adiós 2020, parte segunda
Y llegó marzo, y con marzo llegó dFERIA, y llegó la pandemia… y nos encerramos en casa y nos pusieron una mascarilla. Nos despersonalizaron, nos quitaron la sonrisa de la cara, la borraron. Nos convirtieron en más individuos que nunca, en los más individualistas, si cabe, en la historia de la Humanidad. Mataron la sociabilidad, anularon la cooperación, nos dividieron de facto, generaron la desconfianza en el otro, crearon la “Gestapo” de balcón.
En definitiva, han jugado con nosotros, y con la bondad de las gentes. El virus existe, es evidente, como evidente ha sido que hay poderes en la sombra que han aprovechado la coyuntura para experimentar la creación de un mundo nuevo, de un nuevo orden económico. Han apagado “el ruido” que la crisis de 2008 no consiguió apagar, y han generado concentraciones de capital no conocidas hasta el momento. A partir de ahora, “manejaran los hilos” y dirigirán el mundo de una manera mucho más sencilla para ellos. Se acabó la libre competencia, se acabaron las oportunidades de verdad. Quedará el reparto de las migajas entre los que puedan sobrevivir. Se están dedicando a exigir muchos esfuerzos a los ciudadanos, con muchos vaivenes, con muchas contradicciones, sin criterios claros, sin cumplir con sus quehaceres: ni han reforzado los servicios, ni han implementado los recursos, ni han tomado medidas paliativas durante los confinamientos. Se ha movido toda la sociedad, menos los estamentos políticos. No son capaces ni siquiera de suministrar la “famosa” vacuna a un ritmo aceptable y decente. No son capaces de prever la producción de la propia vacuna al ritmo que se necesita. Capaces de copiar a Alemania en todo menos en lo importante,… En Euskadi el Lehendakari anuncia su intención de adelantar el toque de queda a las 8 o incluso a las 6 de la tarde. En cambio, en Bilbao los políticos locales crean un tumulto público por querer sacarse una foto con el Athletic, recién campeón de la Supercopa. ¿Quién se cree que no sabían lo que iba a pasar? ¿para estos no hay multas? No pasa nada…
Pudimos celebrar dFERIA por los pelos. Conscientes de la que nos venía encima, nos pusimos a trabajar desde el principio. Apoyamos a los artistas en un inédito programa on line, DK EN CASA, con el objeto de mantener encendida la “llama” escénica y propiciar un valioso apoyo a los artistas, como eslabón más débil en nuestro sector. Suspendimos 30 espectáculos entre el 15 de marzo y el mes de junio. Fuimos capaces de recuperar el 60% de ellos entre junio y diciembre del mismo 2020. Y otro 15% se reprogramará a lo largo del 2021.
A nivel personal, el primer confinamiento me ayudó mucho. Trabajé a media jornada con algunos días de teletrabajo a la semana. Esta situación me ayudó a disfrutar de estar en casa. Después de treinta y pico años de una ajetreada vida profesional, el parar, mirar hacia el futuro y el poder disfrutar de estar en casa, disfrutando con las mascotas, y pudiendo estar tiempo de relax con Fernanda, sin prisas, sin viajes, sin presión. Teniendo tiempo para pensar, para replantear cosas, para discernir lo importantede lo supérfluo. Realmente, esa burbuja de tiempo, ese frenazo en la rotación de mi propia vida, me ayudó; debe ayudarnos a crecer como seres humanos. El Covid sigue siendo un reto. Fue una prueba muy seria en su momento, y se ha convertido en una carrera de fondo.
El Teatro Victoria Eugenia fue el primer teatro en reabrir sus puertas en el Estado español después del fin del primer confinamiento. Concretamente, el día 10 de junio con una gala ofrecida a los “sanitarios”. El 13 de junio la primera representación en euskera, y desde ese momento hasta ahora. A partir de ahí, 30 funciones colgaron el cartel de “no hay localidades”. Llenos conseguidos gracias, entre otras cosas, a la confianza conseguida entre el público gracias a los protocolos covid implantados. El público comenzó a sentirse cómodo y seguro en los teatros. Además de una oferta muy seleccionada. Salvamos hitos importantes como el Premio de Teatro Donostia, en euskera, el Ballet T Egunak, la programación de Teatro de Verano, …Por desgracia, no podemos olvidar, ni obviar las limitaciones de aforo, los espectáculos clausurados, la desaparición de las campañas escolares o la ausencia de los grandes musicales que dejaron de visitar la ciudad.
Si tuviera que quedarme con algunos espectáculos, sin desmerecer otros… Me quedaría con:
-“Jauría”. Jauría es una dramaturgia creada a partir de las transcripciones del juicio realizado a La Manada, construido con fragmentos de las declaraciones de acusados y denunciante publicadas en varios medios de comunicación. Una ficción documental. Un juicio que marca un antes y un después. Elenco encabezado por María Hervás. Jauría es Premio Max al Mejor Espectáculo de Teatro 2020. Además, recibió el Premio Cultura Contra la Violencia de Género 2019 del Ministerio de Igualdad por su contribución en la erradicación de la violencia contra las mujeres y el Premio Ercilla 2019 a la Mejor Creación Dramática.
-“Losers”. Jon Plazaola y Aitziber Garmendia llenan el Teatro Principal durante cinco funciones. Dos personajes, dos perdedores, piensan que no podrán salir adelante, que ellos no merecen ser felices. Pero se equivocan. Porque todo el mundo tiene derecho a la felicidad, y porque ser feliz no depende de los bienes materiales o de lo que determinen las modas, depende de nosotros mismos. Txalo Producciones es una de las productoras culpables de que el teatro en euskera se encuentre en uno de los momentos más “dulces” de su historia, si no es el más dulce. Textos reconocidos y de éxito, buenas versiones y adaptaciones, buen nivel de euskera y buenos actores y actrices, muy solventes también en el conocimiento y en el manejo del idioma.
-“¡VIVA!”. Es un canto a la libertad del movimiento, donde lo femenino es abrazado como propio, desde el cuerpo masculino, donde los patrones de género, en un mundo codificado como el flamenco se rompen desde la alegría y el gozo, creando nuevos terrenos que, aunque inexplorados, no nos resultan lejanos… En clave de celebración, Manuel Liñán propone la pluralidad del baile, las distintas formas y la singularidad de cada una de ellas. Y lo hace junto a seis bailaores-bailarines, que serán los encargados de explorar y bucear en este universo fascinante de lo femenino, visto desde lo masculino, y exponer así, estas dos identidades, que forman parte de nuestra propia naturaleza.
-“Hnuy illa”. En 1995, Joseba Sarrionandia publicó un libro de poemas que constituye un hito en la literatura vasca, Hnuy illa nyha majah yahoo. Kukai Dantza, con motivo del 25 aniversario, ha preparado la reedición del libro y una nueva versión del espectáculo basado en aquel, en una revisión actualizada por Kukai Dantza del trabajo anterior.
En el aspecto musical, Mikel Laboa fue un maestro a la hora de convertir en música la poesía de Sarrionandia. Y junto a Laboa, un compañero inseparable: Iñaki Salvador. La música de ambos será el eje central de la banda sonora del espectáculo, junto a las colaboraciones de Ruper Ordorika y María Berasarte. La coreografía está firmada por Jon Maya (Kukai) y el guión y dirección de escena por Mireia Gabilondo (Tanttaka). Mucho mérito realizar una nueva lectura de un espectáculo que fue tan grande y tan laureado en su momento, y conseguir un espectáculo que iguala, o incluso supera su primera versión. ¡Felicidades!
En el último trimestre de 2020 nos hemos dedicado fundamentalmente a organizar la feria del 21. Ya la tenemos. Pronto la presentaremos. Será la primera feria del año 2021 y se desarrollará entre el 15 y el 18 de marzo, con permiso del covid. Libramos y salvamos dFERIA 2020 y esperamos arrancar el año “feriante” del 21 con dFERIA 2021, con “futuro” como leit motiv. Personalmente, reconozco encontrarme un tanto cansado, no rendido con la situación. Hay que parar un poco, respirar y concentrarnos en encontrar nuestro ritmo interior, equilibrarnos y seguir hacia adelante.