Los actores argentinos Luis Mottola y Pablo Centomo, bajo la dirección de Nacho A. Llorente, se suben del 7 al 29 de octubre al escenario del Teatro la Tribu Eñe de Madrid para dar vida a los complejos personajes creados por el autor argentino Carlos Gorostiza. Tuco ha abandonado todo y se ha encerrado en el desván. Vive por un sueño: pasar el resto de su vida cantando, como en los viejos tiempos. En un mundo inventado, dentro de las cuatro paredes de un viejo desván, Tuco encontrará, lejos de lo convencional, de lo rutinario, la ilusión para volver a sonreír, a creer, a hacer realidad un sueño. Aislado de su familia, sólo abrirá las puertas del recién descubierto universo a su amigo Sebastián. Y los dos, alrededor de un mítico tango de Gardel, se enfrentarán a su pasado en una travesía que les llevará a un final que ambos desconocen…
El estreno en Madrid de esta pieza magistral del teatro breve argentino, que estará en cartelera durante el mes de OCTUBRE de 2005 en el Teatro La Tribu Eñe de Madrid (Sancho Dávila 33), coincide con el acto que la Asociación de Autores de Teatro de España prepara en homenaje a Carlos Gorostiza, programado para la primera semana de noviembre en el marco del Salón del Libro de Teatro y que tendrá lugar en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.
Estrenado en las sesiones del ciclo de Teatro Abierto bonaerense de principios de los 80, EL ACOMPAÑAMIENTO fue concebido inicialmente como un montaje de naturaleza efímera, y supuso, a pesar de la sencilla apariencia de su planteamiento, un atrevido acercamiento a temas tan cercanos y tan universales como la libertad, la rebeldía social o la realización personal, en un contexto de reconquista social en el que cualquier manifestación cultural era sistemáticamente silenciada y perseguida. En un momento en el que teatro argentino se encontraba aislado por la censura y silenciado en las escuelas de teatro, la propuesta de Gorostiza “basaba su fuerza evocadora en el poder del texto, alejándose necesariamente de todo elemento periférico a la palabra”, explica el director, Nacho A. Llorente. “La capacidad del autor para componer el retrato de una realidad social y cultural a partir de lo simple, de lo pequeño, es brillante. Esta pequeña gran pieza no deja de ser un inquietante tratado sobre los valores sociales y humanos cuya verdad se va revelando a partir de cada nueva lectura. Una verdad dura, aunque siempre acompañada de una reflexión desde la esperanza”.
En el proceso de creación de este montaje, el director ha optado por alejarse de la desnudez teatral a la que parece invitar el propio texto. “La distancia temporal y geográfica habría limitado la capacidad del público para disfrutar de muchas de las sensaciones que se generan en el escenario. Por eso, decidimos romper con el planteamiento asociado habitualmente al teatro argentino de pequeño formato, más austero e intelectual, y apostar por un tratamiento apoyado en recursos teatrales más convencionales. Lo que se ve, lo que se escucha, lo que se siente, no es una simple propuesta estética; el teatro, como la música o las artes plásticas, se recibe con todo el cuerpo, y la escenografía o el espacio sonoro permiten abrir canales de comunicación con el público que facilitan la conexión a nivel emocional.»
Esta producción cuenta con colaboradores de lujo. En la escenografía, Blanca Otamendi, colaboradora de directores como Fermín Cabal o Alberto Miralles, ha buscado la cálida cercanía de un espacio de formas redondas, en el que conviven dos mundos distintos: un presente luminoso de valores perdidos y un pasado difuminado de sueños por cumplir. A esta alternancia contribuyen un diseño de iluminación complejo y un espacio sonoro reverberante y evocador, firmados por el propio director. En el apartado musical, las guitarras en directo de Carlos Echegaray y Lucho Baigo, colaborador habitual de María Dolores Pradera, que acompañan el tango de Bárbara Palmer y Ulises di Roma, coreógrafos y bailarines profesionales. Todos ellos se conjugan para configurar una fotografía sepia en movimiento, con sabor a antiguo, en ocasiones cercana a un fotograma del cine mudo más tradicional.
Sobre ARTEMATOPEYA
La compañía ARTEMATOPEYA trabaja como colectivo creativo desde septiembre de 2004. Dedicados con anterioridad a la creación por separado en distintas facetas artísticas (cine en corto, teatro, música o audiovisual), su montaje de El Acompañamiento ha sido estrenado a mediados de mayo de 2005, aunque esta es su primera temporada en Madrid. El espectáculo servirá también como estreno para la programación regular del Teatro La Tribu Eñe, un nuevo espacio que, desde la “defensa de todas las EÑES del mundo”, se incorpora a la escena teatral madrileña tras algunos meses de rodaje con el propósito de “ofrecer, desde el respeto a toda propuesta artística, un espacio y una oportunidad a los artistas que apuesten por una identidad y que quieran romper con un panorama sombrío de conformismo y quietud”.
Temporada en Madrid:
* del 7 al 29 de octubre de 2005, viernes y sábados a las 21:00 horas
Teatro: LA TRIBU EÑE (Sancho Dávila 31-33 – 28028 Madrid, España)
