BODAS DE SANGRE Aula Teatro Universidad de Zaragoza DIRECCIÓN Javier Arnas
Crítica publicada en el blog “La sonrisa de María” de www.agrifonte.com APLAUSOS DEL PÚBLICO El día 4 de abril (hace un par de semanitas) se representaba en el teatro principal de Zaragoza la prueba de fuego para l@s alumn@s de la escuela de teatro de la misma ciudad. En esta web se leyó mi asistencia y una alusión a una crítica que por pereza no escribí (aunque la amiga con la que iba me decía que lo hiciera) y que fue solicitada posteriormente en los comentarios y que ahora dejo complementado con las estupendas fotografías de Manuel sobre los ensayos y la actuación. Bodas de sangre pertenece a la trilogía clásica del POETA (esta web le debe alguna que otra referencia a la triada de Buñuel, Lorca y Dalí) dedicada a la mujer. Cuando se había representado ya tenemos referencias del propio Lorca que ya tenía el guión de Yerma y luego no tardaría en seguirle la casa de Bernarda Alba con la que cerraría el ciclo. Me desvío en bibliografía pero es que la referencialidad interna e imaginería de Lorca es muy extensa y no olvido que tengo que criticar la representación a la que asistí. La obra dirigida por Javier Arnas fue una puesta en escena sobria y muy eficaz. Podría definirse con el adjetivo de “lorquiano”, y así se mantuvo el resto de la obra con gran homenaje al verdadero autor. Para el primer acto no se necesitó nada más que una silla para la mujer-madre y el hijo. Y así en un austero primer acto representado con la perfecta armonía del texto y la dosis justa de emotividad se anticipaba la tragedia. La mujer ya expone en su planto las navajas y las deudas de sangre y la tierra dadora de vida y enterradora de muertos. Planteada la festividad de la boda en el segundo. Con la actuación de los secundarios alegre y festiva indicando la boda al margen de las duras palabras que se cruzan el equivocado amor de la novia. De fondo y sólo con una pantalla que acogía un color azul o rojo indicando el lado de la emoción por la que se podía destilar la obra tenemos los distintos coros neutros de la pasión de la tradición popular. Muy bien solucionado el climax de la obra con la prosopopeya lunar. La luna lo ve todo. La luna lloraba. El fantasma mendigo se pasea. Los amantes han huido, no se olvidaron del coro de leñadores, antes de la fiesta con el sonido de los cascos de caballos ya se anticipaba la tragedia (este es un motivo común a esta trilogía lorquiana). Vuelve a ser la hora de las navajas, de la luna, de la sangre el fantasma mendigo sigue paseando parsimoniosamente como la lenta muerte inexorable. Y el fin trágico por supuesto. Llegaron los aplausos de un público entregado. Y el baile flamenco como guinda final. Minutos de aplausos, el público en pie y estos alumnos con una sonrisa enorme deshacían el encanto del odio de la tragedia que habían creado recordando la farsa del teatro. Así que un 10 para esta gente por el trabajo bien documentado, bien representado, eficazmente resuelto en la actuación y mimando hasta los detalles de los cantes de los coros populares. ¿Esta es la crítica que me pedían? Bueno, sí, aquí la constato y espero que sigan gozando de los vítores de los espectadores y desde aquí mucha suerte para todo. Un placer (y me costó la entrada sólo 6 euros ). (Emilio Gil “gio”)