La palabra como trueno
Obra: Cara de plata
Autor: Ramón María del Valle Inclán
Intérpretes: Pedro Antonio Penco, Rafael Núñez, Francesc Galcerán, Cristina Samaniego, Maite Jiménez, Celia Nadal, Juan Carlos Castillejo, María Ayuso, Javier Azuara, Alberto Iglesias, Carlos Domingo, Manuel Menárguez, Pietro Olivera
Espacio escénico: Etelvino Vázquez, Javier López de Guereñu, “Txispo”
Música: Mariano Lozano P.
Dirección: Etelvino Vázquez
Producción: Al Suroeste Teatro, S.L., Teatro I Piau, Producciones Cachivache
Auditorio Municipal – Puertollano- 07-11-02 Feria de Teatro de Castilla-La Mancha
La palabra de Valle, cuando se trabaja con todas sus consecuencias en el escenario, suena como un trueno. Esta es una Comedia Bárbara que contiene rasgos esperpénticos, que refleja las conmociones sociales en Galicia cuando se está cuestionando el poder feudal, irrumpiendo una primera conciencia de clase por parte de campesinos y pastores, con la presencia siempre alucinante del poder eclesial. Todo ello con historias pasionales de por medio, utilizando la mirada a las costumbres desde una óptica desgarradora de esa realidad que se convierte en poética a pesar de la contundencia de los diálogos, de las tramas profundas, de lso conceptos más filosóficos.
Con este material de Valle se han visto auténticos plomos, en este montaje se logra el milagro de la profundidad didáctica. Cuanto más se ahonda en la propuesta de Valle, mejor suena el texto, más claras quedan las tramas, se entienden perfectamente las metáforas y las simbologías y se va enriqueciendo el espectador al sentirse partícipe de esos momentos en donde unas campanadas se convierten en axioma o un silencio previo a una frase contunde: “me temo que soy el diablo” del personaje principal hace que el oscuro final sea un paso a un explosión de júbilo por haber disfrutado de un texto denso, muy profundo, dicho por un equipo de actores que han comprendido la obra y la forma de manifestarla según los criterios del director Etelvino Vázquez que logra el milagro de hacer a Valle accesible cuanto más transcendente, esperpéntico cuanto más orgánico, político cuanto más visceral.
Carlos GIL
