La Casa Encendida presentará en tres fines de semana el ciclo teatral «Mujeres a pie de guerra», que trae a escena tres montajes recientes que son tres ventanas abiertas al conflicto, tres trabajos unipersonales cargados de la energía femenina de sus intérpretes. El programa se inaugura los días 13 y 14 con la obra italiana ‘A de Srebrenica’. A la obra italiana ‘A de Srebrenica’, que ofrece -con ligereza de cuento de hadas y precisión de documental- una mirada rigurosa y penetrante sobre la guerra de Bosnia, le seguirá, los días 20 y 21 de diciembre, la francesa ‘Stabat Mater Furiosa’.
Se trata de un oratorio profano, un conjuro con el que su intérprete exorciza el espíritu bélico, una plegaria violenta y necesaria. Cerrará el ciclo, los días 27 y 28, el montaje español ‘La mujer invisible’, de la compañía L’Om-Imprebís que da la palabra a una africana sin voz de entre las decenas de miles que llegan a Europa cada año, y materializa lo que habitualmente escamotean las informaciones sobre inmigración ilegal. Este ciclo ha sido comisariado por Javier Vallejo.
LAS OBRAS
‘A de Srebrenica’, de la actriz Roberta Biagiarelli, la directora Simona Gonella y la historiadora Giovanna Giovannozzi, es un espectáculo que narra, con la distancia y el candor de un cuento de hadas, la guerra de Bosnia. El relato, interpretado en castellano por la actriz italiana, abarca desde el momento en que comenzaron los secuestros de civiles (poco después de la declaración, en la primavera de 1992, de la independencia de Bosnia-Herzegovina) hasta el desenlace del sitio de Srebrenica.
El espectáculo ayuda a mantener viva la memoria de este genocidio. Para su trabajo, las autoras se han basado en ‘La guerra in casa’ (Einaudi, Turín, 1998), libro de Luca Rastello que recoge el relato de ciudadanos bosnios huidos, y en las actas del Tribunal de la Haya.
El montaje, que se estrenó en 1998 y que en sus giras ha llegado a Sarajevo, se encuadra dentro de la «orazione civile», movimiento teatral italiano que lleva a escena conflictos sociales recientes solucionados en falso. ‘Stabat Mater Furiosa’, de Jean-Pierre Siméon, con música de Bruno Gillet, es un oratorio profano, una plegaria violenta, un conjuro con el que Antonia Bosco, su intérprete, exorciza el espíritu bélico de nuestro siglo.
La actriz y cantante francesa lanza una invectiva furiosa contra los responsables de no importa que guerra, de todas las guerras que han sido y serán. En ‘La mujer invisible’, de la autora, actriz y directora británica Kay Adshead, una periodista africana negra (interpretada por la actriz brasileña Rita Siriaka) cuenta como fue perseguida sin tregua en su país por intentar expresar su opinión, su huida rumbo a la Unión Europea y como una vez allí, es decir aquí, se ve empujada cuesta abajo, como tantos inmigrantes sin papeles.
Adshead la escribió a raíz del motín que en 1997 sacudió el centro de detención de extranjeros de Campsfield, en Oxford, y de participar en una campaña para forzar su cierre. El montaje de L’Om-Imprebís, dirigido por Santiago Sánchez, ha superado en número de representaciones al británico con 170 representaciones en España y ha viajado además a los Estados Unidos, Suramérica y África.
