Comunicado tras el fallecimiento en accidente de Héctor Álvarez en la Expo
Héctor Álvarez Grande, técnico de sonido de 28 años de edad, natural de León, falleció en la tarde del pasado 7 de agosto, a consecuencia de una caída desde el falso techo del Palacio de Congresos de la Expo-08 de Zaragoza, donde se encontraba trabajando. Diferentes Asociaciones de Técnicos del Espectáculo han redactado el comunicado que transcribimos íntegramente. COMUNICADO TRAS LA MUERTE POR ACCIDENTE LABORAL DE HÉCTOR ÁLVAREZ GRANDE, TÉCNICO DE SONIDO EN LA EXPO-08
Héctor Álvarez Grande, técnico de sonido de 28 años de edad, natural de León, falleció en la tarde del pasado 7 de agosto, a consecuencia de una caída desde el falso techo del Palacio de Congresos de la Expo-08 de Zaragoza, donde se encontraba trabajando.
Esta noticia, recogida por una mínima parte de los medios de comunicación, tanto gráficos, como audiovisuales, cuyo silencio resulta, cuanto menos, extraño, viene acompañada por una serie de inconcrecciones e, incluso, incorrecciones que, desde el colectivo de técnic@s de las artes escénicas, queremos que sean corregidas. Por ello, desde ATAE (Asociación Profesional de Técnic@s de las Artes Escénicas), ATECAT (Asociación de Técnic@s de Catalunya), ATEMAD (Asociación de Técnic@s de Madrid) y ATEPV (Asociación de Técnic@s del Espectáculo del País Valenciá) emitimos el siguiente comunicado:
Queremos aclarar, en primer lugar, que el accidente mortal de Héctor Álvarez Grande, no ha sido el primero sucedido en la Expo, antes o después de su inauguración, dentro o fuera de su recinto, como se ha publicado en los medios informativos reiteradamente. El primer fallecido fue un colombiano de 43 años, que murió en julio de 2006, en una planta hormigonera de Ranillas. En febrero de 2008, un trabajador de 54 años, vecino de Soria, falleció al caer al vacío desde un quinto piso de un edificio en construcción (información extraída de www.20minutos.es
Por otra parte, la Expo rinde homenaje a Héctor al principio de cada espectáculo, con la siguiente comunicación al público: “El equipo de este espectáculo y Expo 2008, quiere expresar su dolor por el fallecimiento de un compañero en el día de ayer. Esta función se realizará en su recuerdo”. Si bien es de agradecer esta deferencia, sería de justicia añadir que “el fallecimiento” no tuvo lugar por causas naturales. Se trata de un accidente de trabajo y, como tal, debe de ser explicado.
Conocida la dolorosa noticia del fallecimiento de Héctor y, ante la convocatoria de una Asamblea de trabajador@s de la UTE (Unión de Empresas Temporales) y de la Expo 08, representantes de las distintas Asociaciones de Técnic@s de Artes Escénicas nos desplazamos a Zaragoza para asistir a la misma.
Directiv@s de la Expo consintieron en que ATAE estuviera presente en la visita que, una hora antes de la reunión de trabajador@s, tuvo lugar para aportar datos sobre la muerte de Héctor y, posteriormente, revisar el lugar en el que tuvo lugar el fatal accidente. En este sentido, hay que especificar que, a falta de los resultados que arroje la investigación oficial en curso, pudimos comprobar, in situ, los siguientes extremos:
-El acceso al espacio de trabajo, carece de señalizaciones, tanto de acceso como de prevención. Estas últimas, se estaban colocando (en folios impresos) en el momento de la visita.
-El pasillo que da entrada a la pasarela de trabajo, presenta estructuras de aire acondicionado, roscadas al techo, no señalizadas, que obligan a agacharse para librarlas y a la utilización de casco, ante el riesgo de golpearse la cabeza. En ningún momento se ofreció esa EPI a l@s visitantes de lo que se intuye que es práctica habitual.
-La pasarela, que parece cumplir la norma preceptiva, en lo que a distancias e instalación de líneas de vida y arneses de seguridad se refiere, para trabajos de iluminación, nos genera serias dudas para afirmar lo mismo en lo que respecta a los trabajos de sonido: acceso a la P.A.
-Ante las dificultades de acceso a la P.A., se había habilitado un camino rudimentario por medio de tablones que cruzaban los paneles del falso techo, excepto en la placa de 40 x 70 cm. que se saltaba, para acceder a la siguiente pasarela metálica y que cedió ante el paso del técnico de sonido. Estos tablones, permanecían aún en su emplazamiento durante la visita. Esta vía, no reglada, parecía ser un camino habitual para realizar tareas de mantenimiento en el área de sonido.
-Si esta práctica, no sujeta a PRL, era habitual, plantea las siguientes preguntas: ¿se desconocía por parte de l@s responsables de la Expo? ¿se consentía tácitamente su utilización? ¿se comunicó en algún momento a l@s trabajador@s que estaban incumpliendo la normativa?
En la reunión con l@s directiv@s de la Expo se puso de manifiesto que “a partir de ahora” se va a llevar a cabo una ampliación de las medidas preventivas existentes orientadas, principalmente, a la señalización, al tiempo que se va a llevar a cabo una mayor vigilancia por parte de l@s prevencionistas hacia l@s trabajador@s, obligándoles al cumplimiento de las normas de PRL.
Es necesario hacer constar que, por lo que al Palacio de Congresos se refiere, no pudimos ver, en ningún momento, a lo largo de la visita, carteles referidos a la evacuación del local en caso de siniestro, ni indicaciones claras sobre orientación a l@s visitantes ni, tampoco, señalización de las áreas de peligro.
La Asamblea de Trabajador@s, en la que estuvieron presentes responsables de la UTE y de la Expo, se redujo a la explicación de los hechos que condujeron a la muerte del técnico de sonido y a la propuesta de diversas formas de rendirle homenaje. No se adoptó ninguna medida reivindicativa.
Superados los primeros momentos de dolor, divers@s técnic@s de la Expo se han puesto en contacto con las distintas Asociaciones, para notificar las supuestas irregularidades que han captado en el funcionamiento de distintos espacios de la Expo y los riesgos que esas supuestas irregularidades podrían entrañar para trabajador@s y público asistente. Igualmente, han pedido asesoramiento para conocer qué vías deben tomarse a fin de saber, exacta y puntualmente, cómo se encuentra la investigación del caso abierto.
Declaraciones como las recogidas por el diario digital “Aragón” de Manuel Pina (CCOO) y José Manuel Solanas (UGT) (“conocemos bien esa zona y no se puede pasar por ella sin un arnés. No sabemos por qué estaba allí ni qué estaba haciendo”) obligan a pensar que, o bien no existe un control adecuado por parte de l@s responsables de equipo, o bien se está intentado culpabilizar, a priori, a quien ya no puede defenderse. Si conocen tan perfectamente la zona, deberían saber que se había habilitado un área de trabajo al margen de cualquier norma de PRL y, presuntamente, no se puso coto a ese uso indebido.
En el mismo rotativo afirman que no se habían registrado quejas en materia de seguridad por parte de l@s técnic@s y, en la propia Asamblea, divers@s profesionales manifestaron que no habían recibido la formación necesaria, y preceptiva, sobre trabajos en altura ni prevención de riesgos, a pesar de haberla reclamado, verbalmente, en diversas ocasiones.
El Heraldo de Aragón, pone en boca de CCOO afirmaciones que indican que en el Palacio de Congresos “las medidas de seguridad están por encima de lo que exige la ley” y El Periódico de Aragón recoge las siguientes palabras de Manuel Pina, del mismo sindicato: “las medidas de seguridad pasiva están todas”. Si tenemos en cuenta que, al menos, no existe cartelería preventiva e informativa, esta aseveración es cuestionable.
Otro tanto ocurre con el plan de evacuación del mismo espacio, solicitado reiteradamente por varios técnic@s, a lo largo de dos meses, sin que hasta el día 9 de agosto, se hubiese facilitado a l@s reclamantes del mismo.
Desde estas líneas pedimos:
A los medios informativos:
-el tratamiento de esta triste noticia con el mismo rigor y publicidad que se brinda a otros siniestros: tráfico, género, construcción, etc.
Al Juzgado de Instrucción que conoce de las diligencias judiciales:
-el total esclarecimiento de los hechos que condujeron a la muerte de Héctor.
-la depuración de responsabilidades hasta sus últimas consecuencias sin ignorar que el Código Penal también prevé y castiga el delito contra la seguridad de los trabajadores, que castiga no sólo la acción u omisión directa que lleva al resultado de muerte sino también todas aquellas conductas que incrementan el riesgo del accidente por omisión de las exigencias legales y reglamentarias en materia de seguridad de los trabajadores.
A la Inspección de Trabajo:
-que indague todas las circunstancias del accidente de trabajo sin ignorar el fraude de ley en que se incurre con habitualidad en la contratación de técnic@s que determina su competencia, así como el cumplimiento por la empresa y organizador@s de todas las obligaciones sobre seguridad de l@s trabajador@es en este desgraciado siniestro.
-que no secunde los intereses organizativos y municipales y se ciña al cumplimiento de la Ley con ambición, contrastando la información facilitada y facilitando a la autoridad judicial el resultado de sus investigaciones.
-que vele y sancione adecuadamente el incumplimiento de horarios y capacitaciones necesarias para desempeñar las tareas que asumen l@s diferentes técnic@s de las artes escénicas.
A los diferentes departamentos de Trabajo y Seguridad e Higiene en el mismo:
-la urgente regulación de las distintas profesiones que componen el sector de las Artes Escénicas.
-que velen y sancionen adecuadamente el incumplimiento de horarios y capacitaciones necesarias para desempeñar las tareas que asumen l@s diferentes técnic@s de las artes escénicas.
A l@s técnic@s de las Artes Escénicas:
-que vigilen y denuncien, personalmente, o a través de las Asociaciones constituidas, las numerosas irregularidades laborales y los incumplimientos en la legislación que, diariamente, se producen en su labor cotidiana. Las prisas, las peculiaridades de nuestro trabajo y el vacío en la legislación, posibilitan tanto los abusos por parte de las empresas contratantes, como la precariedad en las condiciones de desempeño que abocan a los accidentes laborales.
Es nuestro derecho y nuestra obligación, conseguir que esta profesión sea reconocida y regulada por la Administración. Y es nuestra deuda con l@s compañer@s que ya no se podrán beneficiar de estas acciones, que el número de víctimas no aumente.
El dolor no se puede mitigar, pero no debemos permitir que el sentimiento nos aletargue. Es la hora de actuar. En el espectáculo y fuera de él. En la tramoya y en los tribunales de justicia. Es el momento de crear un cuerpo compacto y de conseguir que, de la misma manera que a l@s albañiles, l@s intérpretes, l@os fontaner@s, l@s médicos o cualquier otr@ trabajador@, la Administración nos dote de una base legal que anule la precariedad laboral en la que vivimos.
El pasado ya no tiene remedio. Pero el futuro nos pertenece todavía.
A los familiares de Héctor:
-que cuenten con todo nuestro apoyo, nuestro cariño y nuestro esfuerzo por conseguir que la muerte de un miembro de nuestro colectivo no quede en el olvido. Sentimos con ellos su irreparable pérdida y nos sumamos a su tristeza.