Cuarta edición del Festival Barribrossa
Hasta el póximo día 2 de abril se realizará el Festival Barribrossa que impulsa el Espai Escénic Joan Brossa y que incluye artes como el circo, el cabaret, los títeres o la magia que hacían feliz al poeta. Distintos espacios de Barcelona acogerán los 21 espectáculos programados. Todo lo que vaya más allá de las fronteras del teatro convencional tiene cabida en Barribrossa, que se despliega en distintos espacios como el Mercat de les Flors, el Convent de Sant Agustí, la Biblioteca Bonnemaison y –la rareza– los Apartaments Incide-BCN donde el domingo 2 de abril podrá verse Tránsito, una exposición de pintura concebida como un montaje escénico.
La Puntual, la pequeña sala de marionetas que cohabita, pared con pared, con el Espai Brossa, abrirá con varios espectáculos sus funciones para adultos, entre ellos el del veterano Toni Rumbau que presentará A dues mans, mañana y el viernes.
El sábado, 1 de abril, hacia el mediodía, una comitiva de magos y artistas se citarán en la puerta del establecimiento de ilusionismo El Rey de la Magia para celebrar el 125 aniversario del local, y trasladarse primero a la calle Allada Vermell, donde se celebrará un espectáculo de calle de aires carnavalescos escrito por Brossa, y más tarde al Museu de El Rey de la Magia (calle del oli, 6) para degustar varias acciones.
Ese mismo día, de puertas para adentro del Espai Brossa, el mago Hausson estrenará su último trabajo Praeludium de Màgia en si major, que estará en la pequeña sala hasta el 16 de abril, demostrando su capacidad para casar ilusionismo y poesía en un ambiente de café decimonónico.
Una de las propuestas más inclasificables del festival es el espectáculo La Belbel Underground, firmado por los poetas Carles Hac Mor, Gerard Altaió y Eduard Escoffet, que podrá verse en el Mercat desde mañana y hasta el sábado y que se vale del trabajo y de la figura de Sergi Belbel –«gran autor del teatro burgués», como lo definen Mor y Altaió– en concreto de las piezas Elsa Schneider, Tálem y En companyia d’abisme que ellos ha reescrito hasta lograr una obra de «circo de texto, que es una contraparodia». Los poetas confiesan no haber pedido permiso a Belbel, pero prometen «invitarle a a ver el espectáculo». También agradecen la inspiración de Ramón Gómez de la Serna, Jean Genet y Wim Wenders.