Dos espectáculos de teatro, otro de danza y uno más de danza-teatro integran la programación ‘Aire libre’ que organiza ‘El canto de la cabra’ durante los meses de julio y agosto, en el marco de los Veranos de la Villa 2004, en representaciones que se desarrollarán de miércoles a domingo a las 22.00. La Compañía Patricia Ruz dará inicio a las actividades con la puesta en escena del espectáculo de danza-teatro Alas del 7 al 18 de julio. Esta creación que cuenta con la coreografí, la dirección e interpretación de la propia Patricia Ruz, así como de las bailarinas Marina Gutiérrez, Lourdes Mas, Marta Aledo y Marina Wainer, gira en torno a la búsqueda de lo inalcanzable. Lo que uno tiene y no ve. Lo que uno tiene y quiere. Cinco mujeres que desean profundamente volar. Cinco mujeres aladas que viven en un bosque de cualquier tiempo, de cualquier escenario, en cualquier espacio. Estar ahí, en lo alto, entre las nubes, cerca del viento como una obsesión, fundirse por un momento con lo inalcanzable.
La Compañía Hongaresa de Teatretomará el relevo a las representaciones con la puesta en escena del 21 de julio al 1 de agosto de Ilusionistas de Llüisa Cinillé, que interpretan Rosa López, Lola López y Paco Zarzoso, con dirección de este último. La ilusión de continuar creyendo en lo que uno ama a pesar del paso del tiempo y de los fracasos es el eje de esta representación. Recuperar la ilusión de lo que nos hacía felices y que hemos abandonado, Buscarse a uno mismo es difícil, y a veces comporta tomar decisiones que implican cambios radicales, decisiones para las que es difícil encontrar el coraje.
El espectáculo de danza El bufón bajo la tormenta de la Compañía Raravis se representará del 4 al 15 de agosto. Este espectáculo coreografiado y dirigido por Andrés Corchero a partir de un texto de Octavio Paz propone «partir de un texto, de una música o de un poema, para bailarlos sin hacerlos explícitos, ni gráficos, e intentar colocar esto estímulos en el cuerpo y reinventarlo, sugerir unos paisajes físicos utilizando el cuerpo como un vehículo para que el público pueda sentir en libertad y que cada uno pueda crearse su propio espectáculo, porque esos algunos de los elementos que siempre me han interesado», según Corchero.
La clausura del programa llegará con la compañía Cambaleo Teatro y su creación Para nada. Diálogos a partir de un texto de Carlos Sarrió que él mismo dirige. Interpretado por Arsenio Jiménez, Antonio Sarrió, Begoña Crespo, Carlos Sarrió y Julio C. García, la obra realiza un homenaje «al conocimiento. Al esfuerzo individual por tratar de saber qué somos. Porque es de la soledad de lo que se habla, la soledad que acompaña a todo gesto puesto en ese camino». La justificación de que este espectáculo es indivual se debe a que «El poder se apoya en el desconocimiento, en la mezquindad de algunos mitos. En esos mitos que se tambalean ante la serenidad de una fórmula matemática o de un razonamiento. Porque la lucha por saber qué somos no sé si nos hace más libres (habría mucho que discutir para saber si somos libres o podemos llegar a serlo) pero es muy probable que sí nos haga más iguales, no sólo entre nosotros, también con todo lo que nos rodea.
