En cartel

Del túnel del metro a los escenarios

Entre los días 30 de abril y 1 de mayo se va a celebrar en la madrileña Sala Pradillo el II Maratón de Música Callejera en el que cincuenta artistas llegados de 13 países interpretarán su música en dos sesiones de cuatro horas cada día. El pasado año, el I Maratón de Música Callejera demostró que el hervor musical y cultural que se ha apoderado de las calles de Madrid tiene su lugar y su respuesta en el teatro, con una admirable calidad artística aumentada cuando se presenta en mejores condiciones técnicas. El proyecto, que nació con unos objetivos artísticos y socioculturales cumplió con gran parte las expectativas de los organizadores.
En cuanto que se hizo eco de la divertida y variada presencia de músicos de calidad de todo el mundo se formaron colas en la taquilla del teatro, esperando que saliesen espectadores para poder entrar en la sala abarrotada.
Se vivió un ambiente cálido, respetuoso y entusiasmado que culminó cada noche con una animadísima «jam session» entre los artistas programados y parte del público.
Por otro lado, gran parte de los músicos participantes han contado con un aumento de sus posibilidades profesionales a raíz de su programación en el Maratón. Se iniciaron colaboraciones entre ellos, profesionales del teatro y de la música mostraron su interés y han salido nuevas contrataciones.
El mismo Teatro Pradillo, viendo la calidad de algunos de estos artistas, ha iniciado una programación musical estable que ha comenzado con conciertos monográficos de músicos participantes. De esta programación posterior ya ha salido por lo menos una oferta sólida de grabación con una prestigiosa casa discográfica además de la entrada de uno de estos grupos en la oferta musical de la Red de Teatros de la Comunidad de Madrid. Y en diciembre 2001 se realizó una programación musical con artistas participantes en el Maratón dentro de Juvenalia.
En el Maratón se encontraron músicos españoles y extranjeros, jóvenes profesionales y artistas consagrados en su país de orígen. Se escucharon músicas de todos los estilos: jazz, clásica, rap, música de raíces, cantautores, rock, barroca, acústica y electrica… Se comunicaba en castellano, inglés, ruso, búlgaro…. El proyecto entero se empapó de un ambiente festivo y colaborador.
Ahora, siguen adelante con este proyecto, trabajando para mantener su perfil en los medios de comunicación e involucrar a un mayor número de artistas consagrados y programadores en España para establecer unos sólidos lazos de colaboración.

Maratón de Música Callejera 2002

La propuesta para el Maratón 2002 mantiene una duración de dos días, cuatro horas diarias.
La directora de este proyecto, Laura Kumin, ha estado varios meses estableciendo contactos con nuevos músicos que están tocando en espacios públicos no habituales (metro, plazas, parques…). Así, en esta ocasión, contarán con la participación de más de 50 artistas llegados desde Colombia, Brasil, Rumanía, España, México, Urugüay, China, Argentina, Ucrania, Rusia, Georgia (ex URSS), Cuba y Marruecos. Ellos llenarán nuestra sala con sonidos tan distintos como los del jazz, mariachi, clásica, cantautor, música tradicional china, medieval y acústica y eléctrica.
Continuarán con bloques de actuación con una duración aproximada de 50 minutos, dentro de los cuales actuarán tres grupos o diversos artistas afines.
A la vez están convocando a artistas ya establecidos para realizar unas colaboraciones puntuales, que pueden tomar la forma de sesión de improvisación, pequeños monólogos, coreografías y «jam sessions». De esta manera dejamos abierto un espacio para la creación y un aliciente cultural además de solidario para los artistas españoles de trayectoria reconocida que quieran participar, porque pretenden que los espectadores y artistas madrileños conozcan mejor a los artistas que desempeñan una labor efímera (por el carácter de su público) y a menudo anónimaen Madrid. Y, también, darles a conocer a los programadores culturales para ayudarles a integrarse dentro del contexto cultural madrileño.
El Maratón mantendrá, así, su doble vertiente cultural y social:

– promocionar a los músicos y demás artistas dentro de un marco profesional adecuado, ayudándoles a muchos a recuperar una categoría profesional más digna.

– fomentar sus contactos con artistas de diversas disciplinas que trabajan en la ciudad con vistas a posibles colaboraciones.

– romper el aislamiento profesional y cultural que afecta a muchos de ellos.

– ofrecer al público madrileño la oportunidad de disfrutar plenamente de estos artistas.

– Celebrar su presencia en la ciudad, dar a conocer sus nombres y perfiles al público y a los medios de comunicación.


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