El Ballet Nacional de Cuba, una de las más prestigiosas compañías de danza del mundo, vuelve al Euskalduna Jauregia de Bilbao el próximo 27 de noviembre (20.00). Dirigido por la gran Alicia Alonso, ofrecerá una única representación de La Cenicienta, una de las obras maestras de la historia de la danza y, también, una de las piezas más emblemáticas y reconocidas de su repertorio.
La compañía actuó por primera vez en el Auditórium del Palacio de Euskalduna de Bilbao en octubre de 2009. En aquella ocasión puso en escena la obra ‘Giselle’, otra de sus obras más representativas, logrando clamoroso éxito ante un público entregado que abarrotó el recinto.
La Cenicienta se desarrolla en dos actos y es la única música de Johan Strauss (hijo) compuesta expresamente para ballet, aunque otras composiciones suyas hayan sido usadas frecuentemente en obras coreográficas. La versión que se representará en el Palacio Euskalduna fue estrenada en La Habana en marzo de 1996.
El Ballet Nacional de Cuba fue creado en 1948, con Alicia Alonso como principal fundadora y primerísima figura. El rigor técnico-artístico de sus bailarines y la diversidad en la concepción estética de sus coreógrafos, le otorgan un lugar muy destacado entre las grandes instituciones de su género en la escena internacional.
Realiza anualmente un programa de giras internacionales, que lo lleva a escenarios de diversos países de Europa, Asia y América. Ha logrado los más importantes galardones internacionales que se suman a la aclamación de sus valores por parte de los más destacados representantes de la crítica especializada.
Alicia Alonso, actual directora de la compañía, constituye la figura cumbre del ballet clásico en el ámbito de la cultura iberoamericana y es, al mismo tiempo, una de las personalidades más relevantes en la historia del arte y de la danza.
Fue la intérprete principal en el estreno mundial de importantes obras como ‘Undertow’, ‘Fall River Legend’ y ‘Theme and Variations’. En calidad de figura del American Ballet Theatre, actuó en numerosos países de Europa y América con el rango de prima bailarina.
Además de decenas de reconocimientos internacional del máximo nivel, en 1980 recibió un homenaje internacional en París, organizado por la UNESCO y en mayo de 1997 fue homenajeada en el Metropolitan Opera House, de Nueva York, por el American Ballet Theatre. En 2008 recibió la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes.
