El CDN estrena ‘El baile’, de Irène Némirovsky con dramaturgia y dirección de Segi Belbel
La Sala Francisco Nieva del Teatro Valle-Inclán, en Madrid, acoge el 14 de enero el estreno de El baile, un espectáculo basado en un relato de la escritora Irène Némirovsky, que ha sido producido por el Centro Dramático Nacional y el Teatre Nacional de Catalunya. Esta adaptación de El baile que dirige Sergi Belbel a partir de dramaturgia creada por él mismo, reúne en el escenario a las actrices Anna Lizaran y Francesca Piñón y a las bailarinas Sol Picó y Xaro Campo que se alternan en las funciones.
Esta coproducción que cuenta con la dramaturgia y la dirección de Sergi Belbel, la coreografía de Sol Picó, la escenografía de Max Glaenzel y Estel Cristià, el vestuario de Mercè Paloma, la iluminación de Kiko Planas, la música de Òscar Roig y el sonido de Roc Mateu, permanecerá en cartel en la Sala Francisco Nieva del Teatro Valle-Inclán hasta el domingo 14 de febrero de 2010.
Según explica Belbel, «El baile, breve aunque inconmensurable novela de Irène Némirovsky, es la pequeña historia de una venganza, la de Antoinette, una adolescente oprimida, asfixiada, por su madre, la señora Kampf, una mujer exuberante, que acaba de pasar de la pobreza a la opulencia prácticamente de un día para otro. Esta venganza impulsiva, casi sin premeditación, será terrible y hará caer las máscaras del núcleo familiar y social de los señores Kampf. En el texto de Némirovsky, la tensión que se establece entre la pequeña Antoinette y su madre adquiere casi la categoría de duelo, de combate entre dos personajes que aparentemente resultan antagónicos, pero que acaban revelándose como dos caras de una misma moneda».
Belbel reconoce que «fue la propia Anna Lizaran quien me hizo leer esta extraordinaria novela, y me hizo comprender que era fácilmente dramatizable para ser vista sobre un escenario. La idea de que una hija, Antoinette, a quien su madre no deja asistir al ‘baile’, no fuera una actriz sino una bailarina, surgió posteriormente, cuando la propia Sol Picó me comunicó sus ganas de ir más allá y de participar en algún espectáculo teatral. El duelo literario de Némirovsky se podría transformar, así, en un combate escénico entre una gran actriz y una gran bailarina y coreógrafa. La novela explora magistralmente los movimientos interiores y los tormentos que provoca la adolescencia en la mente retorcida y compleja de Antoinette y estos vaivenes emocionales podrían ser interpretados perfectamente a través de la danza y el movimiento».
Belbel concluye que este espectáculo es en realidad, un «experimento escénico» que tiene la prenteión de «explorar los límites de la teatralidad para explicaros la historia terrible, cómica y trágica, de dos mujeres fatalmente enfrentadas a sus propios tormentos”.