El director teatral Paco Suárez acusa a Paco Marsó de manipular su trabajo
El estreno en Madrid de la obra de O´Neill «Deseo bajo los olmos» enfrenta a Suárez con el productor por cuestiones artísticas y económicas, según informa JUlio Bravo en ABC, el director teatral Paco Suárez acusó ayer al productor Paco Marsó de manipular su trabajo en la obra teatral «Deseo bajo los olmos», de Eugene O´Neill, en la que aquél firma la versión y la dirección. El director teatral Paco Suárez acusó ayer al productor Paco Marsó de manipular su trabajo en la obra teatral «Deseo bajo los olmos», de Eugene O´Neill, en la que aquél firma la versión y la dirección. «Se ha manipulado en cuanto a las luces, a la escenografía y a la dirección de actores», dijo ayer a ABC.
Suárez reclama también al productor 22.500 euros que, asegura, le debe Marsó por este trabajo, y desea que su nombre desaparezca de los carteles y la publicidad de la obra, ya que el espectáculo «no se presenta tal y como yo lo he concebido». El productor, por su parte, argumenta que se le ha pagado la mitad de lo acordado (24.000 euros según su versión) y que se ha respetado escrupulosamente la dirección original creada por Suárez.
El montaje de «Deseo bajo los olmos» que enfrenta a director y productor se estrenó en Badajoz el pasado mes de febrero, tras un preestreno en la localidad madrileña de Galapagar. Mañana está prevista su presentación en el teatro Real Cinema de Madrid, un estreno que ayer trató de impedir Paco Suárez.
El director acudió por la mañana a la SGAE, donde solicitó por escrito que se suspendiera el estreno de la obra. Su argumento era, por una parte, que no se habían cumplido «los requisitos legales en la autorización de la versión por los herederos del autor, ni su registro legal en la SGAE»; también aseguraba en la carta que no se había realizado «en términos técnicos y artísticos lo acordado con el productor», y denunciaba el impago de sus honorarios económicos como autor de la versión y director.
Marsó, sin embargo, depositó ayer por la mañana en la SGAE el importe de los derechos correspondientes a los herederos del autor de la obra, Eugene O´Neill, con lo que la solicitud de suspensión del estreno quedaba sin efecto.
Suárez se mostraba ayer por la tarde desolado -«los autores y los creadores estamos indefensos ante personas y situaciones así»- e insistía en su deseo de que no se relacionara su nombre con este montaje. Marsó contestaba que no tenía sentido que se retirara su nombre, ya que el director había cobrado más de la mitad de su trabajo y que, además, éste había sido escrupulosamente respetado tanto en el aspecto técnico como artístico.