Hoy, viernes 15 de julio, será día de estrenos en la 28 edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro. Nada menos que seis espectáculos levantan el telón. Corresponderá a la compañía El Mirón Cubano abrir el fuego con el espectáculo callejero La extraña y anacrónica aventura de Don Quijote en una ínsula del Caribe y otros sucesos dignos de contarse y representarse. Este montaje, que relata un sueño en el que Don Quijote y Sancho Panza se trasladan al otro lado del Atlántico, a una isla del Caribe, volverá a salir a las calles almagreñas al día siguiente. El Corral de Comedias, el más emblemático de los escenarios del Festival, acogerá la representación de Ricardo II, de Shakespeare, bajo la dirección del londinense Steven Berkoff y con el actor Timothy Walter en el papel principal. En el Teatro Municipal, la novela de Cervantes es teatralizada por el grupo colombiano La Candelaria, que en El Quijote rescata el espíritu festivo e irónico del texto clásico y plantea como temática actual la necesidad de una utopía.
Otras dos miradas sobre el universal libro de Cervantes se estrenan también mañana con carácter absoluto. Por un lado, Rafael Álvarez El Brujo da rienda suelta a su extraordinaria capacidad interpretativa en Los misterios del Quijote o el ingenioso caballero de la palabra. El Brujo estará solo frente al público del Claustro de los Dominicos hasta el sábado 23 de julio. Por otro, Ainhoa Amestoy, bajo la dirección de Pedro Víllora, se transformará en el Patio de Fúcares en María, la juglaresa de Lavapiés, y dará vida a los personajes femeninos que pueblas las páginas de la inmortal novela cervantina. La obra lleva por título Quijote. Femenino. Plural (Sanchica, princesa de Barataria).
Por último, la compañía catalana Tàbola Rassa realiza una particular versión de El avaro, de Molière, en un espectáculo, que tendrá lugar en la Iglesia de las Bernardas, de títeres para adultos.
La Compañía Nacional de Teatro Clásico, que estrenó ayer jueves El castigo sin venganza, de Lope de Vega, realizará la segunda función de este clásico que dirige Eduardo Vasco.
