El Festival de Otoño a Primavera acoge en marzo ‘Alexis, una tragedia griega’ y otros dos estrenos
El Festival de Otoño a Primavera acoge en marzo y abril los estrenos de tres espectáculos presentados por la compañía italiana Mutus, por el compositor Heiner Goebbels que regresa a los escenarios madrileños con ‘Max Black’ y por la actriz Aurélia Thierrée, nieta de Charles Chaplin, que presenta su última creación ‘Murmurs’.
La XXX edición del Festival de Otoño a Primavera acoge tres nuevos estrenos durante los meses de marzo y abril. La compañía italiana Motus revisa una de las figuras más controvertidas del teatro clásico, Antígona, con la puesta en escena del montaje Alexis, una tragedia griega, que estará en cartel del 7 al 9 de marzo. El aclamado compositor Heiner Goebbels regresa a los escenarios de la Comunidad de Madrid con uno de sus grandes éxitos, Max Black, que podrá verse del 8 al 10 de marzo. Finalmente, le llega su turno a la actriz Aurélia Thierrée, que vuelve a Madrid con su último espectáculo, Murmurs, del 4 al 7 de abril.
La compañía Motus define el leitmotiv de su proyecto Antígona, dentro del cual se enmarca Alexis, una tragedia griega, como una mirada al pasado con el fin de reflexionar sobre el presente. El montaje es una investigación documental y poética sobre la complejidad de la historia contemporánea.
Los artistas escuchan el latido de lo que sucede en la calles cada día y lo incorporan de forma constante e infatigable a su trabajo sobre las tablas. La obra, que estará en el Teatro Pradillo (C/ Pradillo, 12. Madrid) del 7 al 9 de marzo, saca a escena la relación indispensable entre el arte y la ciudad como punto de partida de los cambios políticos y sociales de cualquier sociedad. La compañía italiana propone así una inmersión en la tragedia griega para trasladar al espectador a las crisis contemporáneas que desde hace un tiempo agitan las grandes metrópolis europeas.
Con Motus el escenario se convierte en un ente dominado por una presencia coral, emotiva y conmovedora. Sobre las tablas se dan la mano diálogos, entrevistas, reflexiones, intentos de traducción del griego al inglés y al italiano, fragmentos de audio y vídeo interactivos, descripciones de ambientes y paisajes, declaraciones políticas y un sinfín de testimonios. La obra está sobretitulada al castellano.
Fuego, acción y sonido sobre las tablas
El genial director y compositor Heiner Goebbels crea un arte teatral tan refinado como su exquisita técnica instrumental, desarrollando un lenguaje muy personal donde estilos musicales aparentemente incompatibles confluyen. En el espectáculo Max Black, que se estrenó en abril de 1998 en Lausanne (Suiza), y pudo verse en el Teatro Nacional de Cataluña en 1999 y en el Festival de Otoño de la Comunidad de Madrid en 2002, Goebbels emplea textos de Paul Valéry, Georg Christoph Lichtenberg, Ludwig Wittgenstein y del propio Max Black para componer la obra.
El público madrileño podrá disfrutar de nuevo de Max Black gracias al Festival de Otoño a Primavera, en esta ocasión, en los Teatros del Canal (C/ Cea Bermúdez, 1. Madrid), del 8 al 10 de marzo. Este montaje trabaja con el reflejo del fuego de una forma inesperada y sorprendente, mientras la música, los sonidos y los ruidos son enteramente producidos y activados por un investigador, el actor André Wilms, solo en escena. El escenario se convierte en un laboratorio de ideas que el espectador descubre poco a poco conducido por unos fusibles que, encendidos, desencadenan reacciones en cadena. Todo lo que el intérprete hace se transformará en luz (fuego), imágenes (acción) y música (sonido).
Ilusionismo escénico maestro
Ya en el mes de abril, del 4 al 6, los Teatros del Canal serán el escenario del regreso a Madrid de Aurélia Thierrée, con Murmurs, tras la gran acogida que recibiera su anterior pieza El oratorio de Aurélia, programada por el Festival de Otoño en primavera en 2010. Uno de los linajes artísticos más aclamados del último siglo, Thierrée-Chaplin, acerca ahora al público a un hechizante despliegue de ilusionismo escénico especialmente creado por y para la joven Aurélia, nieta de Charles Chaplin. El espíritu indomable de esta obra maestra habla de tradiciones únicas y de una imaginación efímera que redefine el concepto de teatralidad a cada paso.
Murmurs es una pieza onírica y sensual concebida como una continuación de El oratorio de Aurélia, donde las ciudades abandonadas vuelven a la vida y las habitaciones exhalan ríos de información, historias de gentes que una vez existieron. Una mujer sola huye de la realidad, con su vida empaquetada en cajas de cartón. El misterio aflora y la protagonista es perseguida a través de edificios abandonados y calles que no llevan a ninguna parte. La escena es un rompecabezas que poco a poco se ensambla, gracias a la traviesa mezcla de ilusión, manipulación, circo y danza que la directora de la pieza, Victoria Thierrée, saca a escena.