El Proyecto Teatral BIOROOM se celebra en Barcelona entre el 15 y el 21 de octubre
El Proyecto Teatral BIOROOM que invia a aventurarse en el dormitorio, entrar en un reino con sus costumbres propias, su lenguaje, sus incidentes y su actividad se desarrolla en Barcelona entre el 15 y el 21 de octubre, con la participación de cinco jóvenes directores.
Metáfora de la interioridad, del cerebro, de la memoria, figura triunfante del imaginario romántico y más aún del simbolista, la habitación, es el testigo, la guarida, el refugio, el envoltorio de los cuerpos durmientes. Espacio en expansión cada vez más especializado, pieza creada por la urbanidad, por el sentido de la intimidad, por la evolución de la vida familiar y por la del propio individuo en particular, la antigua cámara, mejor conocida hoy día como habitación ha pasado a ocupar un lugar destacado en el curso del desarrollo humano.
BIOROOM se propone, dentro de un proyecto escénico más amplio que indaga sobre las intermitencias de lo real en el campo de las artes escénicas; como un conjunto de intervenciones que pretende transformar esos lugares de intimidad y de uso cotidiano como lo son las habitaciones, en escenarios temporarios y experiencias que le permitan al espectador un acceso subjetivo a espacios concebidos para la intimidad contemporánea del sujeto. Siguiendo las aportaciones de Pierrot: En una sociedad cada vez más cuadriculada y controlada, la habitación mantiene un último derecho al secreto. Ofrece las posibilidades de una isla, aunque sus potencialidades aumentan a causa de las tecnologías de la comunicación que colocan al mundo sobre la pantalla del ordenador. El viaje alrededor de la habitación se convierte en viaje alrededor del universo. (Perrot:2011:447)
En este sentido las habitaciones se nos presentan como átomo, como célula que remite a todo aquello de lo cual forma parte, y de lo que es partícula elemental: el sujeto, la ciudad, la sociedad, el mundo … es decir la vida.
La habitación es una caja nos dice Perrot, real e imaginaria. Cuatro paredes, techo, suelo, puerta y ventanas estructuran su materialidad. Su tamaño, forma y decoración varían con el tiempo y con los ambientes sociales. Su cierre, al igual que un sacramento, protege la intimidad del grupo, de la pareja o de la persona. La habitación además lo protege a uno mismo, sus pensamientos, sus cartas, sus muebles, sus objetos. Como trastero acumula. Como defensa, repele al intruso. Como refugio, acoge.
¿Que sucedería entonces si invirtiéramos estos parámetros? Que acogiera al intruso. Que ese «gabinete de prodigios» se abriese al otro. ¿Que sucedería entonces si fuéramos invitados a husmear en habitaciones reales en Barcelona, a dialogar con la intimidad del otro?
Los anfitriones serian los huéspedes reales de esas habitaciones. No actores. Dispuestos a compartir intimidad. Las suyas, reales, sin ficcionalizar. Las puertas se abren: Y nos encontramos con el otro, a la deriva de la soledad contenedora de su habitación. En las historias, en los sujetos, en las habitaciones y en los restos de lo real la vida atraviesa, le da una identidad, una música particular que quizás nos suene cotidiana.
De eso trata BIOROOM, de aventurarse en el dormitorio, entrar en un reino con sus costumbres propias, su lenguaje, sus incidentes y su actividad. BIOROOM es hospedarse por un momento en la vida del otro, en su intimidad, en lo real y desde ahí repensarse en la de uno mismo y en la de la comunidad a la cual pertenece.
BIOROOM cuenta con la participación de los directores Daniela De Vecchi, Cristina Gamíz Caurín, Marc Chornet Artells, Javier Vaquero Ollero y Juan Manuel Urraco Crespo.
Los días, horarios y espacios domésticos de las cápsulas deben consultarse en
www.bioroombarcelona.tumblr.com
www.facebook.com/Bioroom
Para asistir a las cápsulas deben hacerse reservas previamente en el correo electrónico bioroombcn@gmail.com ya que el aforo está limitado a 15 personas