«La lucha continúa». Artículo de Emilio Gutiérrez Caba, Presidente de AISGE y de la Fundación AISGE, ante el 50 aniversario de la histórica huelga de intérpretes:
Vayan apuntándose la fecha, porque, después del paréntesis navideño, se va a convertir en prioridad y elemento de gran valor simbólico: 24 de febrero, sede madrileña de Comisiones Obreras, auditorio Marcelino Camacho, calle Lope de Vega. Si ese lunes andan ustedes por Madrid, anótenselo en la agenda y hónrenos con su presencia, porque instituciones como la Unión de Actores celebrarán, con el respaldo de la Fundación AISGE, un acto conmemorativo y reivindicativo para celebrar el 50 aniversario de la histórica huelga de 1975 protagonizada por las actrices y actores de este país. Aquella fue la ocasión para reivindicarnos como trabajadores de pleno derecho y no esos meros “comediantes” o “titiriteros” con los que las élites y las clases dirigentes querían caricaturizarnos y minusvalorarnos. Una tendencia al desprecio hacia las gentes del arte, la cultura y el espectáculo que medio siglo más tarde, por cierto, no se ha desvanecido del todo; por mucho que desde entonces, como resumiría el cantautor y poeta Pablo Guerrero, haya tenido que “llover a cántaros”.
Permítanme, para los más jóvenes o desmemoriados, unas breves pinceladas de historia. En enero de 1975 se celebraron en el Sindicato del Espectáculo elecciones a vocales de las actrices y actores españoles. Se presentó una lista oficial del sindicato franquista y otra alternativa compuesta por 11 miembros donde figuraban nombres de actores y actrices apoyados por todas las organizaciones democráticas. Naturalmente esa lista fue rechazada por el Sindicato Provincial y por el Nacional. Entonces se planteó la posibilidad de integrar a sus componentes en la lista oficial, opción que fue rechazada. Ante esta negativa se planteó la posibilidad de interrumpir las representaciones teatrales, los rodajes de cine y las grabaciones en TVE. Asi fue, y durante la semana larga de huelga permanecieron cerrados teatros de toda España. Buena parte de los espectadores que acudían a las salas, desconcertados, se encontraban con las suspensiones de todos los pases, y acababan solidarizándose con los huelguistas y dando por buenas las cancelaciones de los espectáculos.
Al final, en ese pulso desigual y casi temerario, conseguimos liberar a las compañeras y compañeros detenidos por defender la exigencia de incluir a los 11 miembros de aquella lista alternativa. Ese fue el motivo de la huelga y no otro. Y nadie lo supo resumir mejor que otro cantautor, en este caso el asturiano Víctor Manuel, cuando aquel mismo año nos hizo tararear una melodía que desde entonces jamás se nos ha borrado de la cabeza (ni del corazón): “¡Cómicos! Duermen vestidos, viven desnudos, beben la vida a tragos / Son adorados, son calumniados, como dioses de barro”.
Emilio Gutiérrez Caba, Presidente de AISGE y de la Fundación AISGE
