Si alguna vez ha estado vacío el Auditorio Insular de Fuerteventura durante una representación, esa vez fue ayer (02/06/01). Tan sólo 4 (cuatro) personas acudieron a la cita con la música cubana del que fue niño prodigio, pianista y compositor Ernesto Lecuona (1895-1963). Si alguna vez ha estado vacío el Auditorio Insular de Fuerteventura durante una representación, esa vez fue ayer (02/06/01). Tan sólo 4 (cuatro) personas acudieron a la cita con la música cubana del que fue niño prodigio, pianista y compositor Ernesto Lecuona (1895-1963). Ya antes de comenzar la actuación, el pianista José Luis Fajardo y el crítico musical, colaborador de publicaciones como El Mundo o el Diario Las Américas, de Miami, comentaban extrañados la ausencia de prensa y la poca publicidad sobre el evento. Habrá que ver, por curiosidad, si Canarias 7 califica la representación «como un éxito más de la programación de Auditorio, como viene siendo habitual» en referencia a Cabaret Atlante, obra a la que acudieron poco más de 20 (veinte) personas, como viene siendo habitual..:( Dónde está el error? mala publicidad? mala elección de los espectáculos? falta de interés de la audiencia? No deja de ser extraño en todo caso, que de entre todos los habitantes de la isla, sólo vayan cuatro un sábado a la noche a un concierto de piano de esta categoría. Claro, debido a la gran cantidad y variedad de actos culturales y de ocio programados ayer en la isla, es lógico, que alguno se quede escaso de espectadores. Fajardo, calificado por El País como «el más grande intérprete de Lecuona» hizo un recorrido por las distintas etapas musicales del compositor cubano, etapas que fueron introducidas por el Profesor Machado. En el programa, que se vio ligeramente acortado, contaban obras como el Vals Crisantemo, A la Antigua, Danza Negra o Andalucía. El Profesor Pedro Machado, después de 40 años viviendo en España, será homenajeado en los próximos días en Madrid y Miami (por iniciativa de un ex-alumno suyo residente en EEUU), tras lo que volverá a la capital de nuestro país para quedarse, un poco como en su día comentó Lecuona; «Hago de Madrid mi hogar, y punto de partida de Europa».
