El montaje de Rajatabla Teatro, Fair Play, cerró temporada el pasado sábado en la madrileña Sala Cuarta Pared con la asistencia de 1.100 espectadores a lo largo de las tres semanas que la obra estuvo en cartel, lo que supone un 75% de ocupación.
La obra, escrita por el cordobés Antonio Rojano, está dirigida por Antonio C. Guijosa y se centra en la convivencia de un equipo de fútbol español en los últimos partidos de la temporada. Los malos resultados, las conspiraciones e, incluso, una acusación de asesinato pondrán a prueba la entereza del equipo.
Fair Play nació durante un encuentro de dramaturgos emergentes –ingleses y españoles- en las instalaciones del Royal Court Theatre de Londres durante el invierno de 2007 y se amplió posteriormente en el taller de escritura de la Sala Cuarta Pared En blanco, en el año 2009. La escuela puso a disposición del autor a un grupo de actores y un director, Antonio C. Guijosa, que quiso continuar el proyecto de manera profesional más allá de este laboratorio de creación. Además de Guijosa, en el salto de la escuela a la industria permaneció en el equipo el actor Esosa Omo, al que se han sumado los siguientes intérpretes: Fael García, Roberto Saiz, Samuel Señas, Juanma Navas y Maya Reyes.
En palabras del director, licenciado en la RESAD de Madrid y habitual colaborador de Ernesto Caballero en sus trabajos, el montaje es «una mirada humana a un mundo que se ha deshumanizado». Guijosa ha puntualizado que «es un intento de mirar un poco más allá del titular de prensa y descubrir las pulsiones humanas que se esconden detrás de resultados, estadísticas y curiosidades sobreexplotadas en los telediarios». La presencia del deporte no suele ser muy común en los textos dramáticos, sin embargo, Rojano, (que posee galardones como el Premio Nacional de Teatro Calderón de la Barca o el Marqués de Bradomín) recuerda algunos antecedentes cuando rememora que «en España el boxeo ha estado presente, con la pieza clásica de Fermín Cabal o el Urtain de Animalario». Además, el autor hizo referencia a Lola Blasco a propósito de uno de sus textos sobre atletismo, así como a José Ramón Fernández porque, entre otras cosas, introduce ciclistas en Para quemar la memoria. Rojano añadió que el fútbol siempre se afrontó «indirectamente» y, a su parecer, «hay cierto temor a dar con él».
Gracias a la apuesta de la coordinadora del proyecto En Blanco, Laila Ripoll, en el montaje («nada futbolera», según relata Rojano) y al apoyo de Rajatabla Teatro y de Antonio C. Guijosa, la obra pasó de una muestra del «work in progress» y un pre-estreno a la propuesta de hacer temporada que les hizo la Sala Cuarta Pared. La compañía estrenó la función pasado 20 de octubre y la clausuró, con gran éxito de público y crítica, el sábado día 5.
El montaje pasó de tener 5 páginas a convertirse en una representación de 90 minutos en la actualidad. A la espera de cerrar las fechas de la gira, Fair Play ofrecerá una lectura dramátizada el próximo 3 de diciembre en el Centro Cultural San Juan Bautista de Madrid dentro del programa de montajes Escenas de noviembre.
