Fusión en el IV Festival Pequeño Teatro Radio City
El próximo día 21 de octubre comienza en Valencia la IV edición del Festival Pequeño Teatro, que promueve la sala evolutiva Radio City. Un festival que en su cuarto año de celebración se consagra como referente en el circuito de festivales españoles de Café-Teatro, gracias a la iniciativa de esta sala que fue la primera en recuperar un género residual y descuidado, de eso hace ya más de cinco años, y que hoy vive sus mejores tiempos con gran proliferación de locales dedicados al género. Entre las novedades de este año se encuentra la creación de un nuevo premio, el “Premio del Público”, que con una dotación de 1.000€, se entregará a la obra favorita del público. Además de este nuevo galardón, las quince compañías seleccionadas podrán optar a un segundo premio de 1.200 €, y un primer premio 3.000€, el de mayor dotación de los festivales españoles de este género. Por último habrá una mención y diploma a la mejor interpretación masculina, otro a la mejor interpretación femenina, y una mención especial “Escena Azul” a la apuesta más original, que junto con los anteriores recibirán los artistas ganadores en la gala de clausura del 2 de diciembre.
Esta nueva edición del Festival Pequeño Teatro Radio City sorprende también por la gran variedad de géneros y la fusión de técnicas en un mismo espectáculo. Por primera vez en este festival estará presente el denominado Teatro de Objetos, un género incipiente basado en la utilización escenográfica de objetos, que la compañía catalana Calamar Teatro traslada a un texto que habla de la destrucción de nuestro hábitat, del consumo por el consumo, y de nuestra loca civilización. “Cosmobasura” recoge la idea del mito del eterno retorno donde el mundo, prisionero del tiempo, se crea y se destruye sin cesar. Se trata de jugar a edificar un cosmos hecho de cosas de usar y tirar donde un brasero puede ser el sol y una hilera de botellas de leche la vía láctea.
También en este cuarta edición se recupera el género medieval de la Juglaría que en su versión contemporánea nos llega de la mano del cuarteto Ron Lalá a través de la composición “Si dentro de un limón metes un gorrión el limón vuela”. Un espectáculo insólito en el que música original de todos los estilos, -jazz, rock, flamenco, blues, son cubano y rumba-, se funde con el romance, la fábula, el cuento, el haiku japonés, el cuento y el melólogo (relato poético-musical) para contarnos todo tipo de historias.
Recién galardonados con el primer premio nacional de Café-Teatro Vélez-Málaga, la compañía Gestus Teatro presenta en exclusiva en Valencia su obra “Versus”, un homenaje a la Comedia dell’arte, también denominada Commedia al improvisso, y a los cómicos del siglo XVI. Versus es un partida de póker donde el espectador decide qué personaje quiere que sea el actor. La malicia del espectador se plasma en papel para luego materializarse. Los actores son meros “arcilleros” de las ideas, como afirma Antonio Romero, uno de los componentes de la compañía.
En la misma línea innovadora y de estilo personal se resuelve la última propuesta de los chilenos Colectivo Teatral Plancton: “El Crimen del Cura Tato”. El Crimen del Cura Tato es un trabajo realizado con la técnica del espacio mínimo en el que siete actores suben todos juntos a una escenario de un metro y medio de ancho por tres de largo, para relatarnos una historia de amor real entre una niña y un clérigo, utilizando su cuerpo como única escenografía para crear imágenes e ilusiones de tipo cinematográfico.
En la cuarta edición del Festival Pequeño Teatro también hay espacio para los clásicos: el musical, el mimo, la pantomima, el cabaret, el clown, la comedia y el drama siguen ocupando un lugar importante en la programación del festival.
La compañía valenciana Melalcohólicas propone un comedia en tono femenino a propósito de la participación de tres mujeres en el “II Congreso Anual sobre Sexo y Melancolía”. Dentro del mismo género, el grupo sevillano Teatro de Lux presenta “Quiero ser libre”, un repaso a la estupidez humana, mientras los valencianos Cia Sin Concretar, nos sorprenden con una divertida oda a la canción: “A.C.A. Asociación de Cantantes Anónimos”. De homenajes va también “La patilla me pierde”. Un espectáculo pseudo-biográfico en el que la protagonista, adicta a los zapatos de gamuza azul, busca al patillas de su vida bajo la influencia de su heroe Elvis Presley.
La compañía sevillana El Calvo Invita, apuesta por el musical cómico con el título “De bar en peor”, y Anísima Cabaret retoma el género del cabaret para mostrarlo actualizado en un monólogo protagonizado por la actriz madrileña Ana Martínez-Abarca.
Ganador de la edición del pasado año, Marcel Tomás repite esta año con “Cascai”, teatro gestual con una gran dosis de imaginación, en el que mezclando en la misma coctelera tres cuartas partes de humor, una cucharadita de clown, y mitad de mimo se obtiene una obra personal al más puro estilo Marcel.
Con un estilo propio se presenta también la pieza “El hombre esquizofrénico del siglo XXI”, una onomatopeya de la vida real que se desarrolla en un autobús de línea y que ha llevado a la compañía Loco Brusca a obtener varios premios, entre otros al mejor espectáculo en el Festival Tempo Zand de Osaka (Japón).
Su espacio encuentra también la danza a través de la artista Cocoro Morishita en una historia sobre antiheroínas y luchas personales. Y por supuesto el drama, que este año está representado por la trama “Calle Dakota” de Sala Cero. Humor demente y psicopático para una historia sencilla pero no tan sencilla, en la que dos amigos se reencuentran en un destartalado apartamento donde nada es lo que parece.
Con la obra “Emboscado”, el actor Jaime Ocaña, ganador de la primera edición, completa el programa del IV Festival Pequeño Teatro Radio City, que será inaugurado el próximo 21 de octubre con la actuación del dúo valenciano Alteradas.