Karina Garantivá y Ernesto Caballero estrenan ‘La mujer buena’
Podrá verse en el Teatro Quique San Francisco de Madrid del 18 de marzo al 17 de abril
El colectivo Teatro Urgente regresa a las tablas madrileñas para presentar su cuarta producción, un espectáculo dirigido por Ernesto Caballero, con dramaturgia de Karina Garantivá, que saca a escena diferentes arquetipos femeninos que huyen del rol que se les ha asignado y se arrojan a la conquista de una incierta libertad. Podrá verse en el Teatro Quique San Francisco del 18 de marzo al 17 de abril.
‘La mujer buena» aborda una versión de la obra ‘Daño‘, de Teresa Arsuaga, junto a otros textos escritos por Karina Garantivá. La creación traduce a escena la filosofía de Nietzsche para proponer un teatro extramoral, que huye de la idea de lo bueno y lo correcto para situarse en el lugar de la duda, la paradoja y la convivencia entre opuestos. De este modo, el colectivo Teatro Urgente aborda, una vez más, los problemas que remueven nuestro tiempo. Como apunta Ernesto Caballero: «Teatro Urgente no pretende ilustrar tesis o sistemas de pensamiento cerrados y unívocos; por el contrario, propicia la controversia dialéctica en una vivificante actuación que encarnan los actores y las actrices. Teatro Urgente actúa el pensamiento, nunca lo ilustra ni lo representa. Es una experiencia festiva que nos lleva a pensar lo que pensamos acerca de nuestra humana condición, y también, de los transitorios recursos expresivos de nuestro inveterado oficio, así como del sentido de nuestro arte».
En la primera pieza, una mujer examina su tendencia a dramatizar como expresión tragicómica de un daño existencial. En la segunda pieza, dos actrices que están a punto de estrenar un espectáculo se enfrentan por el daño que les produce no poder hablar entre ellas. Las dos mujeres representan diferentes arquetipos (la madre, la artista) y juegan a destruir, a través del lenguaje, el mito de la mujer buena. La pieza final aborda, desde el humor, la búsqueda de la verdad en el arte: “¿Acaso lo verdadero puede repetirse cada noche a la misma hora?”.
En palabras de Garantivá, ‘La mujer buena’ habla “de la verdad y su relación con el lenguaje, de lo extramoral en el arte en el sentido que Nietzsche propone, de las siempre conflictivas relaciones entre lo real y su representación”. Para Caballero: “Teresa Arsuaga y Karina Garantivá nos invitan a observar las encrucijadas del daño tanto en su dimensión individual como en la colectiva; el daño con su escudero fiel, el resentimiento, encarnados en dos figuras contrapuestas y a la vez complementarias que se manifiestan en la mujer de nuestro tiempo. Y lo hacen desde una audaz y honesta exposición que hace aflorar mecanismos subyacentes de nuestra común naturaleza como seres vulnerables condenados a preguntarse en qué consiste ser hombre, mujer, buena”.