La industria del teatro pide al nuevo ministro la inmediata bajada del IVA y apoyo en la promoción
El canal de venta de entradas en España Qhaceshoy?, con la colaboración de promotores como SOM Produce, Grupo SMedia, Teatros Luchana o La Escalera de Jabob, exige al nuevo ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, una serie de medidas de choque para el sector. Entre las medidas urgentes, destacan la bajada del IVA cultural al 4%, la eliminación de la competencia desleal que se ejerce desde los teatros públicos y un mayor apoyo en la promoción de la oferta y en la generalización de la venta online.
NOTA DE PRENSA
2 de julio de 2015
«La industria del teatro necesita de una respuesta urgente por parte de las administraciones y reclama al nuevo ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, que ponga en marcha una serie de reformas que faciliten la recuperación de su actividad. Los principales promotores del sector, unidos a la plataforma Qhaceshoy?, líder en España en venta de entradas, urgen la inmediata rebaja del IVA cultural al 4% para equipararse a otros servicios básicos que ya disfrutan de este tipo reducido. De esta manera, el sector del teatro de suma a otras organizaciones y partidos que ya han pedido una acción rápida por parte del nuevo titular de Educación que frente la grave pérdida de competitividad sufrida en los últimos tres años.
Ésta es la medida principal de un decálogo de propuestas elaborado por Qhaceshoy? con la colaboración de promotores como SOM Produce, Grupo SMedia, Teatros Luchana o La Escalera de Jabob para reactivar esta industria y restablecer una oferta cultural a la altura de otras grandes ciudades europeas como Londres o Berlín. Entre las necesidades básicas destacan la eliminación de la competencia desleal de los teatros públicos, mayor promoción a nivel turístico e internacional y apoyo a la innovación en los canales de venta y el equipamiento tecnológico de las salas.
1. Rebaja del IVA cultural: Es urgente la rebaja del tipo fiscal al 7% para «devolver al sector al punto donde estaba», según aseguran desde SOM Produce (‘Priscilla, Reina del Desierto’) o reducirlo al 4% para equiparlo a otras actividades porque «la cultura es necesidad básica de la sociedad», defienden desde el nuevo Teatro Luchana.
2. Eliminación de la competencia pública desleal: La industria reclama el fin de la competencia desleal que ejerce la propia Administración con su oferta de teatro 100% subvencionada en espacios públicos, exenta de IVA y con precios desorbitados fuera de mercado. Además, sería necesaria una liberalización de los canales de comercialización de los espectáculos, ahora concentrados sólo en plataformas exclusivas que limitan el acceso y la difusión.
3. Ley del Mecenazgo: Una clave de futuro es el desbloqueo y el impulso de iniciativas legislativas que favorezcan la participación e implicación del sector privada en el teatro, como la Ley del Mecenazgo, que permitiría a la industria recibir el apoyo económico de empresas por medio de ventajas fiscales y no depender de ayudas públicas que, «en realidad, no las quiere nadie si el sector funciona», sostienen desde Grupo Smedia.
4. Mayor protagonismo en la promoción turística: «En Londres, todo está inundado de oferta de teatro desde que aterriza el avión. Se ha convertido en una visita obligada para el turismo». Esta gráfica sentencia de SOM Produce refleja la reivindicación del sector de un mayor protagonismo en las campañas turísticas internacionales de Marca España o Vente a Madrid.
5. Impulso de nuevos canales y formatos de comercialización: Es necesario generalizar la comercialización online del teatro a través de nuevos canales como Qhaceshoy?, que permite flexibilizar las tarifas para adecuarlas al tipo de espectador. Esta fórmula debe hacerse extensible a la oferta pública para evitar que espectáculos subvencionados y caros tengan niveles ínfimos de asistencia. Además, deben incorporarse nuevas fórmulas de venta como el crowdfunding, que otorga un protagonismo al espectador y permite a los promotores lanzar producciones con el respaldo previo del público, según propone Grupo Smedia.
6. El teatro en la escuela: El teatro ha desaparecido de las aulas y no se fomenta en ninguno de los niveles de la educación obligatoria, como sí ocurre en otros países, donde incluso está reglado como asignatura. Es prioritario incentivar la formación dramática para educar a los futuros espectadores y «generar cultura desde la infancia», reclaman desde Teatros Luchana.
7. Reducción de la burocracia: Las trabas administrativas y los constantes cambios normativos crean inseguridad jurídica y perjudican el acceso a las ayudas públicas para la apertura de espacios y el lanzamiento de nueva programación. La experiencia de Teatros Luchana en su apertura es un ejemplo: «La gestión de ayudas en las tres administraciones es un desastre. No hemos recibido ningún apoyo para la rehabilitación del cine ni para el inicio».
8. Un marco normativo para salas pequeñas: Es necesaria una adaptación de las normativas sobre espacios escénicos y un marco específico para las pequeñas salas de espectáculos, que se mantienen en una especie de «limbo» legal porque los requerimientos están previstos para grandes infraestructuras y son inviables para ellas, lamentan desde La Escalera de Jacob.
9. Canales de difusión en televisión: El teatro no tienes apenas presencia en la oferta televisiva, un vehículo masivo de penetración en la sociedad. El sector propone por ello acercar la programación al telespectador y realizar tanto programas como campañas publicitarias específicas de la oferta dramática de Madrid, como ya ocurre en otras regiones, como Cataluña.
10. Innovación tecnológica y nuevas marcas comerciales: Las salas de teatro necesitan dotarse de nuevos medios tecnológicos como lectores de subtítulos (al igual que en la ópera) que faciliten la asistencia de público extranjero o personas con discapacidad, según proponen desde Teatros Luchana. Además, deben apoyarse iniciativas como ‘Lavapiés, Barrio de Teatros’ que constituyen nuevas marcas y fortalecen la imagen de Madrid como ciudad cultural.»
